Mercosur: socios mayores acuerdan rebaja de arancel externo mientras Uruguay mira a China

El entendimiento entre los dos gigantes de la región marca la cancha en el bloque que acaba de cumplir 30 años empantanado en una discusión sobre su lugar en el mundo y el rol de cada uno de sus socios. Y llega en un momento en el que Uruguay, al influjo de su presidente Luis Lacalle Pou, avanza por su cuenta en la negociación de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con China, más allá de lo que opinen sus vecinos. 

En ese marco, si bien en un principio la postura uruguaya había sido aprovechar el requisito del consenso para atar la rebaja del AEC a la flexibilización del Mercosur  y la habilitación a avanzar a “diferentes velocidades”, en el gobierno ahora señalan que el avance de las tratativas con China ya “camina por sí solo” y deslindan esa negociación de un eventual acuerdo en torno al arancel común.

Fuentes del Poder Ejecutivo consultadas por El Observador dijeron que el tema hoy “no es prioridad” en la agenda regional de Uruguay, pero que hay “apertura” a analizarlo en caso de que se presente. Uno de los consultados transmitió que tras el fracaso de la propuesta uruguaya para flexibilizar el bloque y reducir al mismo tiempo el arancel externo común, ahora la postura del gobierno es concentrarse en el avance de las negociaciones bilaterales con terceros países, y en particular el tratado con China.

Antes del anuncio del inicio de un estudio de factibilidad para avanzar hacia un TLC, tanto el canciller Francisco Bustillo como la ministra de Economía Azucena Arbeleche mantuvieron contactos con sus pares de Brasil para ponerlos en conocimiento de los pasos que iba a dar Uruguay, y conseguir un visto bueno que llegó sobre todo por parte de Paulo Guedes, ministro de Economía de Jair Bolsonaro.

Arancel

La reducción del arancel externo común a importaciones de terceros países, que en la actualidad es de un promedio de 13% a 14%, ha sido uno de los temas más espinosos del bloque en los últimos años, y ha sido motivo de sucesivas idas y vueltas.

El acuerdo de rebajar un 10% el arancel supone un punto medio entre las pretensiones de Guedes (que inicialmente promovía bajarlo hasta un 50%, con el objetivo de reducir la inflación de su país), y las preocupaciones de la industria argentina. 

“Llegamos a un acuerdo en el arancel externo común del Mercosur, que ahora será llevado a los socios, Paraguay y Uruguay, que permitirá la disminución de 10% de un universo muy amplio de productos”, anunció el canciller brasileño, Carlos França, tras recibir a su par argentino, Santiago Cafiero, en Brasilia.

A su lado, Cafiero resaltó la importancia de este acuerdo en un tema vital para la flexibilización del bloque, y dijo que quedan excluidos algunos sectores “sensibles”, como la industria textil y la automotriz.

Los ministros no detallaron en su comunicado a cuántos productos afectaría esa reducción, que aún debe ser aprobada por los otros dos socios, pero una fuente de Itamaraty explicó que incluye al 75% del “universo arancelario”.

El canciller brasileño afirmó además que en su acuerdo, que pondrán a disposición de Uruguay y Paraguay, se deja “libertad para que los países puedan, incluso, ir más allá de ese universo arancelario en esa reducción”.

Tanto Franca como Cafiero manifestaron su voluntad para seguir trabajando en la consolidación del Mercosur como “plataforma conjunta de inserción internacional en un contexto mundial competitivo, incluso a través de la negociación de acuerdos extra-regionales, la mejora del ambiente regulatorio y el perfeccionamiento de las reglas de origen”. 

A lo largo de un comunicado conjunto, los cancilleres se comprometieron a identificar y coordinar acciones para impulsar la recuperación económica en la etapa post pandemia de Covid-19 en diferentes ámbitos, como la integración productiva para un ensamble virtuoso con los circuitos comerciales globales, la economía digital y de los servicios basados en el conocimiento, la integración energética y la integración en el sector de la salud. 

“Estaba todo roto y era muy pública la situación. Y sacamos adelante el acuerdo que es beneficioso para los industriales argentinos”, dijo uno de los consultados por El Cronista, en relación a la tensión interna del Mercosur.