¿Podrá la selección
argentina, que se vio cansada en los últimos minutos del partido contra Perú, triunfar en la altura de Quito, jugando con presión y pocos días de descanso? ¿Le regalará los puntos Ecuador, esperando a cambio algún favor de reciprocidad en el futuro cercano, o saldrá a ganar como si se jugara algo importante?
¿Existe la garra inca? ¿Podrá la garra inca, en caso de existir, ayudar para que el buen fútbol de la selección peruana tenga también la fuerza anímica que se necesita para triunfar en una situación de todo o nada?
¿Habrá final feliz para el milagro guaraní y vivirá Asunción esta noche el ascenso a la felicidad? ¿Se desinfló por completo Colombia, o el mito del ave Fénix tendrá su versión cafetalera justo cuando el abismo está a la vista, ahí nomás?
¿Le regalará Neymar a Messi una noche memorable en la cual liquidar las esperanzas chilenas y salvar a Argentina? ¿Podrá la selección de
Chile estar a la altura de las circunstancias y de su condición de doble campeón de América y lograr una hazaña en São Paulo, con la ayuda del santo y de todos los santos que se necesiten para hacer posible tremenda patriada?
¿Vivirán los uruguayos una noche jubilosa, como la del repechaje contra
Australia en 2001; una agónica, como la vivida contra Costa Rica en la vuelta por el repechaje, en 2009; o bien una apática, sin pena ni gloria, ni fu ni fa, igual a la del partido revancha contra Jordania en 2013?
En un continente con mayoría católica, ¿a las plegarias de que país oirá hoy Dios, luego de que millones de devotos creyentes, en lo sagrado y en el fútbol, rezaran para que su selección consiga en esta jornada lo que no ha podido lograr hasta ahora?
Libro de las preguntas (1974), es una obra póstuma de Pablo Neruda, que contiene varios poemas ingeniosos y divertidísimos, en el que las respuestas, a diferencia de la vida, anteceden a las preguntas. Esta noche concluye la interminable eliminatoria sudamericana, que igual que las anteriores pareció eterna y duró dos años. Y termina de la misma forma que empezó, con una cantidad de preguntas, como si el fútbol fuera un libro abierto, escrito no por Neruda, sino por el Todopoderoso, poeta también.