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OSE y MSP desmienten que la bacteria del estreptococo se encuentre en el agua potable
Tras una viralización de unos audios de WhatsApp en los que se afirma que la bacteria del estreptococo se encuentra en el agua de OSE, y que está "causando estragos en los niños de 5 años", la empresa pública comunicó que lo que allí se dice es falso.
"El agua potable librada al consumo público es totalmente segura desde el punto de vista de su calidad microbiológica, bacteriológica y virológica", sostuvo la empresa.
Según OSE, el agua "cumple sin excepción con las Normas de Calidad de Agua Potable nacionales y las guías de Calidad de la Organización Mundial de la Salud, siendo controlada permanentemente por el Laboratorio Central y los nueve laboratorios regionales".
A su vez, la Dirección Departamental de Salud de Salto sostuvo que "los conceptos vertidos en los audios viralizados no provienen de información brindada por el Ministerio de Salud Pública ni fuentes oficiales". Por su parte, también recomendaron "beber agua de OSE debido a las altas temperaturas" y que el consumo de agua potable no "está vinculada a ninguna situación epidemiológica".
El Ministerio de Salud Pública (MSP), por su parte, dijo que la información que sale de esos audios es "falsa" y "no proviene del MSP ni de ninguna otra fuente oficial".
"Pedimos a la población mesura y prudencia al momento de reenviar este tipo de información que puede generar falsas alarmas y se recuerda que el Ministerio de Salud Pública informa a través de sus canales oficiales", añadió.
¿Qué es la bacteria Streptococcus pyogenes?
El MSP difundió el lunes medidas de prevención contra la bacteria Streptococcus pyogenes, que ha causado infecciones en niños, adolescentes y adultos en Uruguay. Es una bacteria que causa infecciones con manifestaciones clínicas leves –como faringitis o escarlatina– o severas.
Se transmite cuando entra en contacto con las gotitas que emite una persona infectada al toser o estornudar.
Los síntomas de la faringitis son los siguientes: dolor de garganta, fiebre, cefaleas, dolor abdominal, náuseas y vómitos, enrojecimiento de faringe y amígdalas, mal aliento, ganglios aumentados de tamaño en el cuello.
La mejor forma de evitar las infecciones es lavarse las manos frecuentemente; no compartir objetos de uso personal: cubiertos, vasos, toallas; ventilar adecuadamente y de forma regular los ambientes; y mantener superficies limpias y desinfectadas.
