Paro en Bolivia: No cede la tensión en Santa Cruz por la postergación del Censo 2023

Santa Cruz, un bastión de la oposición, acordó hace dos semanas un paro indefinido para exigirle al Gobierno nacional que realice el censo, herramienta que se utiliza para distribuir recursos económicos entre las jurisdicciones y las bancas en el Congreso, ante la decisión del Ejecutivo de aplazarlo hasta 2024 con el argumento de que no están dadas las condiciones técnicas y logísticas como parte de las consecuencias de la pandemia del coronavirus.

“Tenemos la esperanza que el gobierno deje su soberbia de lado, que escuche al pueblo”, afirmó el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, quien reclamó a la policía nacional que levante los bloqueos y controles que impuso en la vía pública luego que una persona muriera en los enfrentamientos que se registraron en el primer día de la medida de fuerza contra la decisión del Gobierno de postergar el censo poblacional.

El Ministerio de Gobierno, en tanto, confirmó que una persona falleció durante los choques que se registraron con piedras, palos y bombas de estruendo entre quienes apoyan la postergación e integrantes del Comité Cívico que lidera Camacho en Puerto Quijarro, una localidad de 20.000 habitantes ubicada en la frontera con Brasil, situación ampliamente difundidas en redes sociales.

Los choques se dieron puntualmente en el Puente Amistad, que conecta Bolivia con Brasil, lo que puso en alerta a las fuerzas de seguridad brasileña. "Condenamos la violencia ejercida durante un paro cívico que provocó la irreparable pérdida de una vida humana", se lamentó el presidente Arce en un mensaje en Twitter, según el diario local Página Siete.

Por su parte, Camacho reiteró que considera “ilegal” la postergación, recordó que el operativo censal debe según estipula la ley cada diez años y afirmó que las estadísticas vigentes desde 2012 no son fiables para redistribuir los recursos federales que le corresponden el departamento de Santa Cruz, cuya población se calcula en casi 2 millones de habitantes.

Por lo pronto, las calles de la ciudad amanecieron vacías y bloqueadas en algunas intersecciones, al tiempo que en algunos barrios se volvieron a registrar choques entre vecinos que apoyan las protestas y otros que reclaman poder circular libremente. Camacho dijo que la situación es "lamentable", acusó al Gobierno por los disturbios y lo acusó de "acarrear gente" desde otros partes del país para contrarrestar la protesta, según informó la agencia de noticias AFP.

Camacho, uno de los principales opositores al Gobierno nacional, tuvo un papel clave en el golpe de Estado contra Evo Morales en 2019. Su imagen con una biblia en alto y arrodillado en la entrada del palacio de gobierno en pleno estallido recorrió el mundo.

En lo inmediato, el mandatario de izquierda Arce convocó anoche al diálogo para evitar el paro, cita que se había fijado para hoy a la mañana, pero que comenzó con una hora y media de retraso e inmediatamente pasó un cuarto intermedio sin un principio de acuerdo. Situación que derivó en un comunicado de la oficina regional de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que exhortó a los gobiernos nacional y local a entablar negociaciones.

"La ONU lamenta la pérdida de una vida humana y exhorta a los actores políticos y sociales a evitar escenarios de confrontación y violencia que pongan en riesgo el orden público y la vida de las personas", expresó el organismo.