La Federación británica de Gimnasia (British Gymnastics) anunció que, a raíz de las críticas recibidas por maltratos a gimnastas, ahora los entrenadores deben autorizar a los gimnastas para ir a beber y al baño durante el entrenamiento, y tienen ahora la prohibición de pesar a los deportistas.
El organismo reveló una parte de las "nuevas prácticas" puestas en marcha para "proteger mejor el bienestar de los gimnastas", más de un año después de las conclusiones de una investigación independiente que destacó múltiples casos de maltrato.
Apoyándose en 400 testimonios, la abogada Anne Whyte denunció maltrato físico y psicológico "sistémico" en un informe de más de 300 páginas.
Whyte señaló que la búsqueda de medallas a cualquier costo había llevado a los dirigentes a graves deficiencias en sus responsabilidades, en especial una fuerte reticencia a intervenir contra prácticas bien conocidas de control de peso de los deportistas.
La nueva norma puesta en marcha por la Federación establece que "los entrenadores no deben pesar a los gimnastas". Esta práctica debe hacerse de forma voluntaria "únicamente por médicos o científicos del deporte cualificados", y con "una justificación clara y científicamente válida".
Por otra parte, "solo los gimnastas de más de diez años pueden ser pesados" en el marco de su práctica, "y los datos de peso deben siempre combinarse con otra medida", según as nuevas indicaciones.
La federación recuerda también el derecho de cada gimnasta a poder "beber regularmente a lo largo de una sesión o de una actividad de gimnasia". El informe había notificado a niños privados de alimento y agua por entrenadores como castigo.
En el entrenamiento, los gimnastas pueden igualmente ir al baño en cuanto lo deseen, se establece en la nueva modalidad de trato con las gimnastas.
(Con información de agencia AFP)