El 63% de los uruguayos considera una mala costumbre que los hombres digan piropos en la calle a las mujeres que no conocen. El 9% los considera una buena costumbre, el 19% respondió que "depende" del contenido y del lenguaje utilizado, el 7% declaró que no es ni bueno ni malo, y un 3% no contestó la pregunta, según una encuesta de Opción consultores publicada en Telenoche 4.
La consultora señala que "el piropo tiene originalmente una connotación positiva en tanto 'halago' o 'cortejo', pero al asociarla con la vía pública y el abordaje de hombres a mujeres sin vínculo previo pasa a ser conceptualizado como una costumbre indeseable por una clara mayoría".
El rechazo al piropo entre las mujeres es levemente superior que el de los hombres, 64 contra 61%.
Entre los más jóvenes, 83% rechaza el piropo; en los sectores de mediana edad, el rechazo es del 58%; y en las personas mayores de 60 años, es del 50%.
Opción consultores concluye que los
datos "son consistentes con un cambio cultural generacional respecto a las relaciones de género, incluyendo el
campo de los vínculos con fines eróticos y sexuales. Por otro lado, es posible que los jóvenes experimenten (en el caso de las mujeres) o presencien (en el caso de los varones) piropos más agresivos y ofensivos, aumentando así sus niveles de rechazo hacia
dicha costumbre".
Según Opción, este dato va en línea con la Encuesta Nacional de Violencia Basada en Género y Generaciones de 2013, que arroja que las mujeres jóvenes son más propensas a ser víctimas de violencia de género en espacios públicos, principalmente de forma verbal.
De acuerdo a la encuesta, "las personas residentes en el interior expresan una desaprobación más fuerte de dicha costumbre, 66% frente a 57% de los montevideanos". Esto se explica por una mayor proporción de adultos mayores en la capital.
Además, "aunque puedan existir algunas diferencias en el nivel de tradicionalismo cultural entre Montevideo y el interior, no existe evidencia de que el interior sea más propenso a la práctica del piropo en vía pública sino que sucede a la inversa", remarca Opción.
Según la encuestadora "no hay una correlación relevante entre apoyo a las ideas feministas y rechazo a los piropos". "Aunque varias organizaciones feministas han sido decisivas para generar un fuerte debate público en torno a los piropos
callejeros, la ciudadanía aprueba o desaprueba tales piropos independientemente de su sintonía con el feminismo", finaliza la encuesta.