Scones rellenos: una receta fácil y rápida para hacerlos

Muchas veces, cuando pensamos en scones, los asociamos a la hora del té. Pueden ser de queso o los clásicos acompañarlos con alguna rica mermelada y queso crema o manteca. Pero también tenemos la opción de jugar con los rellenos y se nos abre un mundo de posibilidades.

Las primeras opciones que se me vienen a la mente son bondiola rúcula y queso crema, salmón ahumado, queso crema con hierbas y eneldo, entre otras miles de variantes. Caprese, de jamón y queso, las opciones son infinitas

Siempre los scones son una buena opción. Hoy comemos scones porque queremos y podemos. Es una receta super rápida. ¿Te dije que es fácil? Es MUY fácil, pero tienen sus truquitos que les cuento a continuación.

Les comparto mi versión de scones rellenos y los invito a que me etiqueten en sus publicaciones (@federicogonzaleztalvi) si deciden hacerlos!

Ingredientes

• Harina 0000 480 gramos
• Manteca 130 gramos
• Leche o crema de leche 330 centímetros cúbicos
• Polvo de hornear 8 cucharaditas
• Sal 2 cucharaditas
• Bondiola en fetas finas 100 gramos
• Muzzarella en fetas 100 gramos
• Queso crema 50 gramos
• Rúcula cantidad necesaria

Procedimiento

• Mezclar en un bowl la harina, el polvo de hornear y la sal. Deshacer la manteca fría dentro de la harina hasta que quede como un arenado. Incorporar la leche y unir hasta formar una masa tierna. Amasar lo menos posible, esto es un punto clave.
• Estirar de 2cm de alto y cortar con el cortante elegido. Redondo, cuadrado, el que más te guste. Rinde aproximadamente 30 scones.
• Colocar sobre una chapa y hornear a 200°C por 10 minutos. El tiempo puede variar según el tamaño que los hayas cortado. Cuando apenas empiecen a dorarse es momento de sacarlos del horno. Es clave no pasarlos de cocción.
• Una vez que los retiran del horno, con cuidado de no quemarse, los cortan al medio y los van a rellenar. Puede ser con las opciones que les comentaba anteriormente o con las que más les guste.
• Los pueden comer tanto a temperatura ambiente como calentitos, yo me inclino más por la segunda opción. Listo, ¡a disfrutar!