La multinacional española Telefónica anunció, en el marco de una reestructuración de la compañía, que separará todos los negocios de América Latina, excepto Brasil, en una nueva empresa, con un equipo al mando específico diferente al del resto del grupo, que tendrá como "objetivo fundamental la atracción de inversores y la obtención de potenciales sinergias con otros agentes de los mercados, con una filosofía de garantizar y maximizar el servicio que le ofrece a sus clientes".
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La empresa informó que creará una nueva empresa con sus unidades latinoamericanas, excepto Brasil para centrarse en cuatro mercados clave: España, el propio Brasil, Reino Unido y Alemania