Con el decreto de la emergencia sanitaria del 13 de marzo vino la suspensión por tiempo indefinido de las clases presenciales en la Universidad de la República (Udelar). Y así como los recursos virtuales pasaron de ser complementarios de la presencialidad a ser centrales en el área de la enseñanza, la coyuntura también obligó a la adaptación en otro nivel fundamental como la evaluación de los estudiantes.