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Una semana de terror en Haití: al menos 471 víctimas del pandillaje en Puerto Príncipe
Al menos 471 personas resultaron muertas, heridas o desaparecidas entre el 8 y el 17 de julio en el marco de la violencia entre pandillas en Cité Soleil, una comuna de Puerto Príncipe, la capital de Haití.
"También se han reportado graves incidentes de violencia sexual contra mujeres y niñas, así como niños reclutados por las pandillas", indicó un informe de Naciones Unidas.
La oficina local del organismo internacional dijo además que unos 3 mil habitantes de esta comuna tuvieron que huir de sus casas para salvarse, entre ellos "cientos de niños no acompañados".
El enfrentamiento entre diferentes pandillas, que se ha enseñoreado en la pauperizada capital haitiana, se inició el viernes 8 de julio, cuando comenzaron a oírse tiroteos.
Como es habitual en estas situaciones, la policía, escasa de personal y mal equipada, se mantuvo al margen todo lo que pudo.
En un primer informe de la Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos contabilizó 89 muertos y 16 desaparecidos, además de 74 heridos de bala o armas blancas.
Pero el informe de la coordinadora de la ONU en Haití, Ulrika Richardson, da una magnitud más real de lo vivido en esos días en que el terror se apoderó de la ciudad, , informó la agencia AFP.
Cite Soleil es uno de los suburbios más pobres de Puerto Príncipe, la capital del país más pobre del continente. El barrio donde se focalizó la disputa entre pandillas es conocido como Brooklyn.
En los barrios marginales levantados durante las últimas cuatro décadas, miles de familias no tuvieron otra opción que resguardarse en sus casas durante la guerra de bandas, sin poder aprovisionarse de comida ni agua.
Muchos habitantes cayeron víctimas de las balas perdidas incluso dentro de sus precarias viviendas hechas de chapas, pero las ambulancias no podían entrar para ayudar a los heridos por la violencia callejera.
El jefe de la misión local de Médicos Sin Fronteras, Mumuza Muhindo, contó que en la única carretera que lleva a Brooklyn se veían gran cantidad de cadáveres en descomposición o quemados de personas asesinadas en los enfrentamientos o muertas mientras intentaban escapar.
La funcionaria internacional pidió que "todas las partes pongan fin a la violencia mortal” y que siga abierto el corredor humanitario abierto a Cité Soleil para permitir el acceso sin obstáculos de la asistencia humanitaria y médica de emergencia a los civiles necesitados".
Las agencias humanitarias, que han comenzado a asistir a las personas más vulnerables, informan de que la situación de seguridad sigue siendo muy frágil.
La declaración de la ONU lamenta que el acceso a la atención sanitaria siga siendo limitado o inexistente ya que muchos centros de salud permanecen cerrados y el personal médico tiene acceso limitado a la zona. A ello se suma “la falta de alimentos y agua".
Desde principios de junio, las bandas criminales atacan instituciones clave de Puerto Príncipe, como el Palacio de Justicia y la Autoridad Portuaria, aprovechando la escasez de personal y de equipamiento en la policía nacional, que no interviene.
Gozando de una impunidad generalizada, las bandas delictivas intensificaron también en las últimas semanas una de sus actividades delictivas, los secuestro.
En junio se reportaron al menos 155 secuestros, superando el registro de mayo, cuando se contabilizaron 118, según el Centro de Análisis e Investigación de Derechos Humanos.
Los enfrentamientos de la semana de terror afectaron las actividades en toda la capital, pues en Cité Soleil se encuentra la terminal petrolera que alimenta Puerto Príncipe y el norte de Haití.
El descontrol provocó un agudo desabastecimiento de combustible en las estaciones de servicio. El único desplazamiento en esos días fue posible en moto, según constataron periodistas de AFP.
Muchos haitianos huyen a República Dominicana o Estados Unidos. Otros, sin medios económicos o visados, arriesgan sus vidas subiéndose en embarcaciones improvisadas con la esperanza de llegar a Florida, pero por lo general quedan varados, fallecen o son detenidos en el mar por los guardacostas estadounidenses.
Más de 1.200 migrantes en situación irregular fueron devueltos a Haití solo en junio, según estadísticas de la oficina nacional de migración.
Con su legitimidad impugnada, el primer ministro Ariel Henry aún no se ha pronunciado sobre el estallido de violencia a principios de julio en Cité Soleil.
Haití está sumido en una crisis política tras las últimas elecciones a finales de 2016, agravada por el asesinato el 7 de julio de 2021 del presidente Jovenel Moise por un comando armado en su domicilio.
