Samsung presentó oficialmente esta semana su nuevo teléfono, el Z Flip, y así continúa un capítulo recién estrenado en la tecnología celular: el de los smartphones plegables de verdad, con pantalla incluida, que solo tienen unas pocas marcas. La empresa surcoreana ya había experimentado en 2019 con el Fold, que se transformaba casi en una tableta. El Flip también se pliega en la pantalla, lo que supone un complejo sistema sobre el que ampliaré en este review, pero en este caso para convertirse en un pequeño dispositivo. Y en este detalle radica buena parte de su atractivo.
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