Mantener un estilo de vida activo es crucial, especialmente después de los 60 años, si se piensa en tener una vejez con bienestar. Un estudio reciente realizado por científicos del Brigham and Women’s Hospital de Boston confirma la importancia de la actividad física en esta etapa de la vida.
Según esta investigación, ejercitarse regularmente puede ser la clave para una vejez más saludable y longeva. Este análisis destaca que no todos los ejercicios son igualmente efectivos para los adultos mayores. Pero entonces, ¿qué tipo de entrenamiento físico es el más adecuado para las personas mayores? Sigue leyendo para descubrirlo, tener una salud increíble y buscar una mejor longevidad.
Ejercicios físicos de bajo impacto: beneficios en la salud de los mayores de 60 años para mejorar la vejez
Las actividades de bajo impacto como el yoga y el taichí son especialmente valiosas para los adultos mayores, no solo por sus beneficios físicos sino también por las oportunidades de socialización que ofrecen. Estas prácticas ayudan a mejorar la flexibilidad y la movilidad, fundamentales para mantener la independencia durante la vejez.
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Además, realizar estos ejercicios en grupo puede aportar beneficios emocionales significativos, como:
- Reducción de la soledad: al participar en grupos, los adultos mayores pueden fortalecer sus redes sociales.
- Mejora del bienestar emocional: estas actividades ayudan a mantener una mente activa y un estado de ánimo equilibrado.
La Organización Mundial de la Salud recomienda entre 150 y 300 minutos semanales de actividad aeróbica moderada, como yoga o taichí, para maximizar los beneficios en la salud de los adultos mayores.
Fortalecimiento muscular: esencial para mejorar la salud y la longevidad en mayores de 60 años
El fortalecimiento muscular debe ser una parte esencial de la rutina de ejercicio para los adultos mayores. La realización de ejercicios que implican el uso de pesas o el propio peso corporal no solo mejora la capacidad funcional en actividades cotidianas, sino que también contribuye significativamente a la calidad de vida y la longevidad.
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Los siguientes puntos destacan la importancia del entrenamiento de fuerza:
- Capacidad funcional mejorada: facilita actividades diarias, como levantarse de una silla o subir escaleras.
- Prevención de enfermedades: mejora la salud cardiovascular y ósea, contribuyendo a una mayor autonomía.
Un estudio de la National Library of Medicine resalta que ganar fuerza impacta positivamente en la longevidad y la calidad de vida, especialmente importante después de los 60 años para conservar el tejido muscular y prevenir problemas óseos. La Asociación Americana del Corazón también afirma que el ejercicio regular mejora la salud cardiovascular en los adultos mayores.
Para asegurar la efectividad y la seguridad de estos entrenamientos, es ideal y prácticamente obligatorio que sean supervisados por profesionales. Además, es importante que el ejercicio físico esté acompañado de otros hábitos saludables, como una alimentación balanceada, una adecuada hidratación, y un manejo apropiado del estrés y del descanso.