La vulnerabilidad comercial de Uruguay fue del 57%, según el Índice de Vulnerabilidad Comercial (IVC) elaborado por el Centro de Estudios para el Desarrollo (CED), que mide la cantidad de exportaciones de un país que se dirigieron a destinos con los que no tiene acuerdos comerciales preferenciales.
Desde el año 2021, el IVC se presenta en dos indicadores, el IVC Preferencias (IVC-P), que mide la proporción de exportaciones que ingresan a destino sin preferencias arancelarias, y el IVC Integral (IVC-I), que suma además el grado de concentración de exportaciones en un único mercado. Valores cercanos a 100 indican alta vulnerabilidad, mientras que los cercanos a 0 señalan baja vulnerabilidad.
De acuerdo con el reporte -que cuenta con datos actualizados hasta 2024 y permite cuantificar la exposición de los países a riesgos externos en función de variables como concentración de mercados, dependencia de productos básicos, calidad de socios comerciales, entre otros factores-, específicamente el IVC Preferencias de Uruguay se ubicó en 57%, lo que quiere decir que el 57% de las exportaciones uruguayas de bienes a 2024, tuvieron como destinos países con los cuales no se mantienen preferencias comerciales, mientras que el 43% restante fue a países con los que Uruguay sí tiene algún tipo de preferencia arancelaria.
Si bien el CED no publicó los resultados del IVC correspondientes a 2023, la comparación con el último registro disponible —el de 2022— mostró un deterioro en la posición de Uruguay. En aquel año, el IVC del país había sido de 53,1%, mientras que en 2024 el indicador volvió a subir, debido a una mayor exposición por el peso de las exportaciones hacia mercados sin acuerdos comerciales, en particular China.
Índice de Vulnerabilidad Comercial de Uruguay
Índice de vulnerabilidad comercial de Uruguay
Centro de Estudios para el Desarrollo (CED)
Ese aumento de la vulnerabilidad de Uruguay se da tras cuatro años de descensos y "se explica fundamentalmente por el aumento de las exportaciones de pasta de celulosa, carne y soja, los cuales se realizan a países con los que no se tienen acuerdos comerciales, especialmente China”, indicó el informe.
El CED especificó que una inserción comercial es más vulnerable cuanto mayores son los aranceles que enfrentan las exportaciones. En ese sentido, indicó que en 2023, Uruguay pagó US$ 380 millones en aranceles y estimó que para 2024 la proyección es de al menos US$ 400 millones.
En 2024, las exportaciones uruguayas de bienes —incluyendo zonas francas— alcanzaron un total de US$ 12.945 millones, triplicando en términos reales el nivel registrado a comienzos de siglo. Este incremento estuvo explicado tanto por la profundización de productos tradicionales como por la incorporación de nuevos sectores a la matriz exportadora, como por ejemplo en el caso de la celulosa.
Los datos procesados por el CED también reflejaron una transformación en cuanto a los destinos de exportación a lo largo del período comprendido entre 2005 y 2024 ya que mientras que en los primeros años predominaban la región y la Unión Europea, en la última ganaron peso China y Estados Unidos.
Los países del Mercosur con altos niveles de vulnerabilidad
El informe advirtió que si bien el comercio internacional se recuperó plenamente de la pandemia, nuevas tensiones como la guerra en Ucrania, los conflictos en Medio Oriente y las medidas proteccionistas de Estados Unidos han puesto a prueba el sistema.
En ese contexto, el reporte también evaluó lo que ocurrió con los países del Mercosur y constató que el bloque se mantiene rezagado en su inserción internacional y con niveles elevados de vulnerabilidad, "reflejo de la falta de acuerdos comerciales relevantes en las últimas décadas".
En ese sentido, concluyó que el estancamiento del Mercosur en altos niveles de vulnerabilidad es un rasgo estructural del bloque y que quien lideró el ritmo de la inserción comercial, con elevada vulnerabilidad fue Brasil (75,8%), seguido por Argentina (57,9%), Uruguay (57,3%) y en último lugar, Paraguay (19,5%) ubicándose como el país menos vulnerable, aunque dependiente fuertemente de Brasil.
Comparación con los países del Pacífico
Por otro lado, el informe comparó el IVC de los países del Pacífico —Australia, Chile, Nueva Zelanda y Perú— y encontró que estos presentan mejores desempeños en inserción comercial, con niveles "mucho más bajos" de vulnerabilidad, debido a estrategias activas de apertura.
De acuerdo con el reporte del CED, Australia mantiene una vulnerabilidad baja y estable (22%), potenciada por el acuerdo con China de 2015, mientras que Chile se consolida como un modelo regional (un IVC de 10%), con una amplia red de tratados que lo protege frente a la volatilidad comercial a nivel mundial; y Nueva Zelanda (37%) que ha logrado reducir su vulnerabilidad desde 2002.
En tanto, el caso de Perú (con un IVC de 13,1%) es uno de los más exitosos de América del Sur ya que en ocho años logró alcanzar niveles de vulnerabilidad comercial similares a los de Chile e inferiores a los de Australia y Nueva Zelanda. Este avance responde, según el CED a un proceso continuo y acelerado de firma de tratados de libre comercio. "El caso peruano muestra que los países del bloque Mercosur pueden lograr ganancias de inserción comercial en período de tiempo relativamente cortos", indicó el informe.
Por último, el CED sostuvo que estos casos dejan en evidencia que la baja vulnerabilidad no es producto de factores estructurales, sino de decisiones políticas concretas orientadas a ampliar el acceso preferencial a mercados clave.