El jefe del Departamento de Asuntos Políticos-Económicos e Investigación Económica en el Centro de Investigación Política del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, Asaf Ichilevich y Elad Wieder, jefe de la delegación israelí ante el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), visitaron Uruguay la semana pasada y mantuvieron reuniones con diferentes autoridades del gobierno para intercambiar experiencias y conocimientos sobre cómo combatir el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.
Lo que sigue es un resumen de la entrevista que Ichilevich mantuvo con El Observador:
¿Cuál fue el motivo de su visita con las autoridades del gobierno uruguayo?
Visitamos Uruguay y también Argentina para conversar sobre el financiamiento del terrorismo, cómo combatirlo y también sobre el lavado de dinero. Llegué junto con el director internacional de la Unidad de Información Financiera (UIF) israelí, porque Israel es un miembro del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI, una institución internacional que busca desarrollar políticas para combatir el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo a nivel mundial) y hemos tenido muchos éxitos en los últimos años. Pasamos todos nuestros últimos exámenes con buenas notas y por eso vinimos, para intercambiar nuestras experiencias y hablar sobre posibilidades de cooperación en esos temas.
¿Con qué autoridades se reunieron y qué acordaron?
Nos reunimos con autoridades de los Ministerios de Defensa, Interior, Banco Central y también con la Secretaría Nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos (Senaclaft). El objetivo principal fue conocer un poco más el caso uruguayo porque la realidad es que en estos temas, en el día a día, en realidad tenemos mucho más colaboración con Argentina, por la historia y las relaciones que tenemos con ellos. Uruguay también es un país amigo de Israel pero hace tiempo no hablábamos de estos temas y acá hay potencial para tener una cooperación más cercana, particularmente para intercambiar informaciones, experiencias, ver cómo se pueden fortalecer esas relaciones entre las organizaciones de ambos países. No acordamos ni asumimos ningún compromiso en específico, hablamos en términos generales para que conocieran nuestro sistema, cómo trabajamos y ver cómo podemos compartirle parte de nuestra experiencia.
¿Con qué percepción se quedó del control que hace el gobierno uruguayo en estos temas?
Es muy complicado tener una opinión clara después de solo un día de trabajo, pero lo que sí vi es que acá hay una buena cooperación entre las autoridades, hay coordinación e interés de combatir este fenómeno. Entendimos que es un país de tránsito, que tienen un puerto importante porque están entre dos grandes países entonces hay retos y por eso creo que esta es una buena oportunidad para tratar de compartir algunas de nuestras experiencias en conjunto. Vimos que también hay un tema de regulación, ese detalle no lo conozco por supuesto pero por eso lo que buscamos es entablar estos lazos internacionales, porque Uruguay no es un miembro del GAFI pero nosotros sí, entonces creo que siempre es una buena idea que Israel esté apoyando a otros países amigos que están en estos procesos de evaluaciones.
¿Qué inquietudes le plantearon las autoridades locales?
Nos trasladaron que era un tema muy serio, esa fue mi impresión. Creo que (el gobierno) entiende bien el riesgo y los desafíos internacionales que implican estos temas. Nosotros pusimos mucho el foco en el financiamiento del terrorismo y lo que planteamos fue que hay una gran diferencia entre el riesgo de terrorismo y el riesgo de financiamiento del terrorismo. Hay muchos países que creen que son una isla de tranquilidad como Luxemburgo y creo que para Uruguay también vale y dicen: "acá no hay un gran riesgo para el terrorismo". Es cierto, pero por otro lado, el riesgo del financiamiento para el terrorismo sí existe en muchos lugares muy tranquilos y esto es algo que reiteramos algunas veces. Ahí hay potencial para cooperar, ahí está el reto para el sector privado. La gente tiene que conocer esos fenómenos, esas tipologías de trabajo de los terroristas, conocer cómo trabajan y eso fue algo que presentamos durante nuestra visita. También nuestras lecciones del ataque del 7 de octubre en cuanto a cómo los terroristas actuaron en el tema del financiamiento de esto.
¿Qué sectores de la actividad económica son más utilizados para el financiamiento del terrorismo en países como estos que menciona?
El problema principal está en el sector bancario. En nuestro caso, por ejemplo, tenemos mucho contacto de Irán que es un país que está bajo sanciones internacionales pero está todo el tiempo buscando bypasses para evitar esas sanciones. Saben cómo funciona el sector bancario entonces a veces abren alguna shell company (en alusión a las empresas "fantasma" que existen en el papel pero generalmente no tiene activos ni operaciones comerciales) y se pasan dinero a través de esa firma o de una cuenta bancaria. Nadie va a un banco y dice: "yo soy Hamás y voy a abrir una cuenta", la mayoría son clandestinos y suelen usar lugares vulnerables o lugares donde el control es un poco débil. Se tiene que tener más conciencia de este tema, es muy importante y particularmente en los países más pequeños.
¿Como Uruguay?
Yo no creo que Uruguay hoy en día sea un lugar donde esté llegando mucho dinero afín al terrorismo, no es un centro. Hay otros países en el mundo que sí y allá hay mucho trabajo para hacer, pero sí creo que todos los países democráticos, libres y que tienen libre comercio, tienen que conocer ese peligro.
¿Qué rol juega la tecnología?
Juega un rol muy importante. Con las herramientas tecnológicas hoy se puede detectar muchísimo más que antes y no se necesita una mega agencia de inteligencia. Hoy en día, a través de algunos vehículos tecnológicos, se pueden detectar muchas cosas que en el pasado necesitaban horas y horas de trabajo, pero por supuesto que los terroristas y los criminales actúan de la misma manera, muy rápidamente y nosotros las autoridades somos siempre mucho más lentos, más complicados en nuestras maneras de trabajo y eso es algo que en Israel tratamos de mejorar para ser más rápidos que los terroristas. Además, hoy en día los terroristas usan mucho las redes sociales para recolectar el dinero. Vimos después del 7 de octubre, cómo Hamas hizo muchas campañas de recolección de fondos que decían que para ayudar a los niños de Gaza pero en realidad era para financiar a los activistas de Hamas. No es mucho dinero pero una cuenta ahí, una cuenta aquí, en todos lados suma una gran cantidad de dinero. Ahí también tenemos que actuar rápidamente, bloquear las cuentas. Ese es un gran desafío hoy.
¿Qué tan importante fue en la mejora que ha tenido Israel en estos temas, la asignación de recursos por parte del Estado?
Muy importante, nosotros invertimos mucho en el caso del UIF, en los departamentos de investigación y desarrollo tecnológico. También invertimos mucho dinero en crear soluciones in-house. Después del 7 de octubre hubo en nosotros un cambio de chip, necesitamos mejorar la coordinación interna entre todas las autoridades y la tecnología y los recursos (económicos) son gran parte de eso también.
¿Cuáles de las medidas que tomó Israel podrían ser aplicables en Uruguay?
Creo que acá tenemos un gran potencial para colaborar. Entendí que en Uruguay no se dedican o no se le pueden dedicar muchos recursos a ese desarrollo tecnológico. Sé que la embajada está haciendo muchos esfuerzos en propagar todo el tema de la innovación y tecnología aquí. Creo que depende de una decisión, de una decisión política al fin de decidir dónde se necesitan destinar los recursos económicos. Además de los recursos económicos también se requiere mucha planificación, coordinación y una estrategia clara que cada año se tiene que repensar.
¿Qué desafíos ve en la región?
Vemos cada vez más y más contactos entre las mafias, los criminales y con potenciales de conectarse con el terrorismo. Por ejemplo, en el triángulo entre Brasil, Paraguay y Argentina, las fronteras. Allá siempre hubo activistas de Hezbollah, sabemos que ellos están tratando de usar esos lazos criminales para apoyar al terrorismo, particularmente apoyar a esa organización. Otro tema que es preocupante para nosotros es que Irán está desarrollando lazos muy cercanos con Bolivia, con Venezuela desde hace ya años, pero con Bolivia han firmado un acuerdo de seguridad que no entendimos exactamente qué significa ese acuerdo y tienen además una embajada muy grande en la región. Eso es algo que más allá de ser preocupante para nosotros creo que es algo que le tiene que preocupar a los países de toda la región, ¿qué está buscando Irán en Latinoamérica? Es una buena pregunta. Hay algunas cosas que no son muy claras y que nos preocupan por esos lazos criminales con los terroristas, por el tema del financiamiento, tenemos que estar siempre a la guarda para ver qué está pasando.
