Temprano en la mañana de este viernes, los presidentes de los países fundadores del Mercosur mantendrán una reunión con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y pasados quince minutos de las nueve de la mañana está previsto que se saquen lo que se conoce como la foto familiar. Ese instante servirá para dar por cerrado formalmente las negociaciones del texto del tratado de libre comercio que ambos bloques negocian desde 1999 y será el puntapié inicial para otra serie de instancias que pueden demorar hasta un año y medio.
Esos pasos implican la traducción del acuerdo a distintos idiomas, una revisión jurídica y luego finalmente la firma.
“Es un proceso que demora, puede demorar un año, un año y medio para poder entrar en vigencia. La parte comercial la tienen que aprobar las autoridades de la Unión Europea y las autoridades de cada país del Mercosur. Después hay algunas adendas más, de otros temas, que tienen que aprobarlas cada país”, explicó el canciller Omar Paganini en la Torre Ejecutiva luego de la reunión de este jueves entre el presidente Luis Lacalle Pou y Von der Leyen.
Esa diferenciación que el canciller hizo entre “la parte comercial” y el resto de las adendas es clave para entender cómo es el proceso de aprobación en la Unión Europea y cuáles son las chances de que Francia –opositor al tratado– pueda bloquear el acuerdo. En una reunión este jueves, todos los cancilleres del Mercosur se pronunciaron a favor del acuerdo.
La posición de Francia
El presidente francés Emmanuel Macron, sumergido en una profunda crisis política interna, ha sido un férreo opositor al acuerdo debido al lobby de los productores agrícolas de su país que ven en el TLC una amenaza a su economía porque señalan que las exigencias ambientales de producción en América Latina no son tan altas como en Europa.
La presidencia francesa informó este jueves que Macron se había encargado de transmitirle nuevamente a Von der Leyen que para Francia el acuerdo es “inaceptable” en las condiciones actuales. Incluso, durante una visita a Argentina a fines de noviembre, Macron deslizó que “no creía” que la presidenta de la comisión firmara un acuerdo sin el respaldo de París.
Sin embargo, Von der Leyen –reelecta en julio con el apoyo de 401 eurodiputados de 720– llegó este jueves a Montevideo para cerrar el mencionado acuerdo que lleva 25 años de negociaciones.
¿Qué puede hacer Francia?
La Comisión Europea tiene potestad exclusiva de negociar y cerrar acuerdos comerciales en nombre de la Unión Europea. La otra parte de los acuerdos –político y de cooperación– deben ser ratificados por los parlamentos nacionales.
Los acuerdos comerciales, una vez negociados por la comisión, deben ser firmados por el Consejo Europeo y ratificados por el Parlamento del bloque. Y es en esas dos instancias es dónde Francia intentará jugar sus cartas.
El Consejo Europeo, donde están representados los 27 países de la Unión Europea, tiene que firmar el tratado. En esa instancia se precisa de una mayoría cualificada para respaldar el acuerdo. ¿Qué es una mayoría cualificada? Se tienen que cumplir simultáneamente dos condiciones para que se conforme: que el 55% de los Estados miembros vote a favor (15 de 27) y que esos Estados representen como mínimo al 65% de la población del bloque.
¿Cómo puede bloquearlo Francia? Necesita convencer a otros países para lograr bloquear el acuerdo. “Tenemos todavía varios países por convencer y trabajo por hacer, buscando una minoría de bloqueo”, explicó a la agencia EFE a mediados de noviembre la ministra francesa de Comercio, Sophie Primas.
¿Cómo se conforma esa minoría? “Una minoría de bloqueo se constituye con, al menos, el número mínimo de Estados miembros que represente más del 35 % de la población de la UE, más un miembro, a falta de lo cual la mayoría cualificada se considerará alcanzada”, dice la web del Consejo Europeo.
Francia es el segundo país más poblado de la Unión Europea –detrás de Alemania que ya anunció su respaldo al acuerdo– y tendrá que buscar otros socios para llegar al 35% de los 450 millones de habitantes (casi 158 millones). Según han publicado medios europeos, Polonia es el país que está más cerca de la posición francesa mientras que el gobierno de París negocia con Italia, Austria y Países Bajos. Con Italia y Polonia alineados solo precisaría de un país más para bloquear el acuerdo.
Todos estos países temen que sus sectores agroexportadores se vean afectados por el acuerdo. Sin embargo, desde el bloque comunitario han puesto sobre la mesa subvenciones para los agricultores y cláusulas de salvaguarda agrícolas que se pueden activar si hay riesgo de desestabilizar el mercado de las importaciones, según informó El País de España.
Del otro lado, Alemania y España lideran las posturas a favor del acuerdo.
Una vez que el acuerdo sea aprobado en el Consejo Europeo, deberá pasar por el Parlamento. “La discusión en el Parlamento no es menor porque es un parlamento muy verde, muy agenda 2030 y del otro lado un Milei contrario a todo eso”, explicó a El Observador el doctor en Relaciones Internacionales, Ignacio Bartesaghi.
Una vez que logre superar todos esos pasos, el acuerdo comercial entra en vigencia. Las adendas políticas y de cooperación que incluye el acuerdo sí deben ser ratificadas por los parlamentos nacionales y eso puede llevar varios años. El acuerdo comercial –el más importante para los países del Mercosur– puede entrar en vigor antes de que las otras dos patas del acuerdo hayan pasado por los parlamentos nacionales.
Cuáles son los siguientes pasos del acuerdo
La cancillería brasileña los resumió en una nota explicativa
- Revisión jurídica: se encuentra avanzado el proceso de revisión jurídica del Acuerdo, destinado a garantizar la coherencia, armonía y corrección lingüística y estructural de los textos del Acuerdo.
- Traducción: una vez finalizada la revisión jurídica, el Acuerdo será traducido del idioma inglés a los 23 idiomas oficiales de la UE y los 2 idiomas oficiales del Mercosur.
- Firma: la firma, en la que las partes expresan formalmente su aceptación del Acuerdo, se realizará una vez finalizada la revisión legal y las traducciones del Acuerdo.
- Internalización: seguida de la firma, las partes remitirán el Acuerdo a sus respectivos procesos internos de aprobación. En Uruguay, el Poder Legislativo.
- Ratificación: las partes notifican la finalización de los respectivos procedimientos internos y confirman, mediante la ratificación, su compromiso de cumplir el Acuerdo.
- Entrada en vigor: el Acuerdo entrará en vigor y, por tanto, producirá efectos jurídicos el primer día del mes siguiente a la notificación de la finalización de los procedimientos internos. Como el Acuerdo MERCOSUR-UE establece la posibilidad de validez bilateral, bastaría que la UE y cualquier otro país del MERCOSUR hubieran completado el proceso de ratificación para su entrada en vigor bilateralmente entre dichas partes.
¿Qué pasó en 2019?
El 28 de junio de 2019 los dos bloques anunciaron el cierre de las negociaciones comerciales. En aquel entonces, los países miembros del Mercosur celebraron el cierre de las negociaciones y catalogaron como histórico el acuerdo alcanzado. Sin embargo, las negociaciones políticas y de cooperación nunca llegaron a cerrarse y países de la Unión Europea aprovecharon ese flanco para insistir con una adenda ambiental.
Ante ese impulso ambientalista, fue Brasil liderado por Lula da Silva el que recogió el guante y pidió reabrir otros capítulos ya cerrados. Eso embarcó a ambos bloques en una nueva negociación que se terminará de cerrar este viernes en la reunión entre los presidentes del Mercosur y Von der Leyen.
