El Ministerio de Ambiente otorgó una prórroga de un año a Efice para reconvertir su producción de cloro y dejar de utilizar mercurio, una decisión que obligó al país a pedir más tiempo para cumplir con el Convenio de Minamata, un acuerdo internacional para dejar de usar este metal en la producción por sus efectos adversos en la salud humana y el ambiente.
Tras conocerse la resolución, la competidora de Efice, Alliance Uruguay –una empresa de capitales norteamericanos dedicada a la comercialización de productos químicos y a la logística industrial que no utiliza mercurio– emitió un comunicado en el que cuestionó la decisión.
La empresa transmitió su "sorpresa y preocupación" por la resolución y planteó que la decisión "erosiona las virtudes que han generado prestigio y reputación a Uruguay a nivel mundial". "Cambiar las reglas de juego, una vez que se han realizado inversiones significativas basadas en los compromisos previamente asumidos por el país, afecta la confianza y pone en suspenso futuras iniciativas de inversión".
La empresa también expresa que Uruguay siempre fue un país destacado por su estabilidad política, social y económica, al igual que por su "seguridad jurídica y respecto por las reglas de juego".
"Con ese respaldo fue que Alliance Uruguay comenzó su operación, con el diferencial de ser la primera y única industria del país dedicada a la producción de cloro y soda con tecnología de vanguardia, completamente libre de mercurio en sus procesos", agrega.
De acuerdo con Alliance, la inversión no fue antojadiza sino por el "compromiso" que había asumido Uruguay en 2013 al adherir al convenio de Minamata. "Uruguay asumió un compromiso ante el mundo y en base a él, Alliance invirtió en tecnología limpia", señala antes de transmitir su discrepancia.
El convenio establece como plazo máximo para dejar de producir con mercurio el 31 de diciembre de 2025, pero Uruguay pedirá un año más de prórroga para cumplirlo.