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¿Debería Balcedo volver a la cárcel? Los argumentos a favor y en contra
Preso o libre: el empresario y sindicalista argentino Marcelo Balcedo y su esposa, Paola Fiege, enfrentan esa disyuntiva desde que fueron detenidos a principios de 2018 en su mansión de Playa Verde, El Gran Chaparral, acusados de lavado de activos, contrabando y tráfico de armas, además de otros cargos que le imputa la Justicia de su país.
Estuvieron en prisión durante gran parte de 2018 mientras se desarrollaban dos causas: la extradición de Balcedo que ya fue otorgada para que enfrente los cargos en Argentina y los delitos que la fiscalía de Uruguay investiga por su parte, luego de que en el allanamiento a su mansión se encontraran armas, varios autos de alta gama y una suma superior a los US$ 6 millones, distribuidos en cofres.
La jueza María Elena Mainard concedió en mayo que Fiege fuera a su casa para que pudiera estar con su familia -donde la esperaban sus hijos-, en el entendido de que no representaba un peligro para la sociedad, entre otros argumentos que prevé el nuevo Código del Sistema Penal (CPP).
Y lo mismo ocurrió en diciembre con su pareja. Marcelo Balcedo descansa ahora en la mansión con su esposa, aunque no tienen permitido salir de la casa en ningún momento, y tienen vigilancia policial durante las 24 horas.
El defensor Marcelo Domínguez había pedido la libertad alegando que este 22 de diciembre se cumplirían los 120 días de privación de libertad que había ordenado la Justicia, por lo que correspondía darles la libertad, o al menos otorgarles prisión domiciliaria. Y además, argumentó que el sistema penal actual concibe la prisión preventiva como una excepción a la regla, y no como la norma, como sucedía hasta noviembre de 2017.
El fiscal del caso, Enrique Rodríguez, se opuso a que fueran liberados, pero concedió la prisión domiciliaria que pedía la defensa en razón de una "igualdad de género" o de un tratamiento equitativo para la pareja: si ella ya estaba en su casa, correspondía lo mismo para él.
Jorge Rodríguez Pereira, el abogado que en la causa de la extradición representa al gobierno argentino, ya anunció que presentará esta semana el rechazo a esa decisión ante el Tribunal de Apelaciones. En diálogo con El Observador, dijo que entiende que Balcedo debe volver a prisión por dos razones: por la debilidad de los argumentos que dio el fiscal para no oponerse a que los imputados volvieran a su casa, y porque se están violando los requisitos escritos en el CPP para que los indagados estén tras las rejas mientras esperan el desenlace de sus juicios.
"El fiscal se amparó en su propia culpa para conceder el cambio: dijo que se había extendido mucho en el tiempo cuando es él el que debe activar y agilizar el proceso; no puede decir que lo otorga porque el proceso va lento", dijo Rodríguez.
Pero, también, en el escrito que presentará el jueves se basará en el inciso L del artículo 224.2 del código. Allí se establece como "requisito para disponer la prisión preventiva" que el imputado sea juzgado por "los delitos previstos en la ley N° 19.574, de 20 de diciembre de 2017, que tuvieran pena mínima de penitenciaría". La ley citada es la nominada ley integral de lavado de activos, por la que es acusado Balcedo.
"Nos oponemos, además, porque sin entrar a discutir la ideología de género, los delitos que él enfrenta son simplemente más graves que los de Fiege", dijo el abogado, y agregó que también tiene en cuenta "los suficientes medios logísticos y económicos para evadirse" de los procesos.
Incumplimiento
El fiscal Enrique Rodríguez sostuvo a El Observador que, en su consideración, para que la apelación del abogado tenga éxito debería "presentar un motivo fundado, como que estén incumpliendo la medida de prisión domiciliaria".
El abogado sostuvo que eso es irrelevante, porque si así fuera el cambio por prisión regular debería darse en forma automática.
Mientras estos debates se suscitan, la pareja se encuentra en la mansión del balneario del este viviendo en una situación "totalmente precaria", según dijo en su momento el abogado Domínguez a El Observador.
“Están solos en la casa, con sus hijos pero sin nadie más, y con el dinero totalmente inmovilizado: se mantienen con ayuda de familiares en Argentina”, agregó el defensor, que negó hacer declaraciones en esta oportunidad, y quien se encuentra preparando la contestación de la acusación fiscal -por los tres delitos imputados- que descargará en una audiencia fijada para los primeros días de este mes.
