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“Liderar es mucho más que gerenciar”
El coaching, entendido como el acompañar o entrenar personas para que alcancen sus metas o desarrollen determinadas habilidades, está en auge en empresas de todo el mundo. En Uruguay, aún no llega a tanto, pero sí se ha iniciado ese camino.
Karina Pittini es la fundadora y socia directora de Human Capital Consulting Uruguay (HCC), además de columnista de Café & Negocios. En una próxima conferencia profundizará sobre el gerenciar con coaching y promete desmitificar algunos conceptos al respecto.
HCC, fundada en 2005, se dedica al asesoramiento en capital humano, gestión económico-financiera, organizacional y tributaria. En 2009, incorporó el asesoramiento en coaching y en 2010 se hizo de la representación de la International Coaching Community (ICC), una organización con sede en Londres que congrega coaches formados en esta metodología.
Este año, HCC abre oficinas en Chile, en el marco de un plan de expansión.
¿Por qué formarse en coaching?
Vemos que los gerentes tienen que ocuparse de muchísimas variables, como el negocio, los resultados, la organización, la coordinación, integrar a las personas, estar atentos al mercado. Todo eso representa un gran desafío, al que se le agrega liderar, que es mucho más que gerenciar.
Por eso, el entrenamiento en coaching es muy útil. El coaching despierta claridad sobre hacia dónde se va, permite visualizar y especificar bien los objetivos, transmitirlos mejor y que la gente comparta ese camino desplegando su propios recursos. Además, aporta valor y genera responsabilidad y compromiso.
¿Qué objetivos persiguen las empresas a través del entrenamiento en coaching?
Pueden ser muy diversos, como por ejemplo tomar decisiones estratégicas, mejorar la comunicación, preparar a los ejecutivos para su próximo paso en la carrera laboral, incorporar una nueva unidad de negocio, desarrollar alguna competencia personal o grupal, gestionar cambios en la cultura organizacional.
¿Cuánto hay que esperar para ver los resultados ?
En mi experiencia, se ven en poco tiempo. Desde la primera reunión ya se ven los cambios. El asesoramiento puede llevar, en promedio, entre 10 y 16 horas distribuidas en sesiones de cuatro semanas. Eso generalmente alcanza para que los participantes se queden con un plan activado.
¿Cómo se generan cambios desde la primera sesión?
Las personas comienzan a darse cuenta de aspectos que, hasta ese momento, no conocían en forma consciente. Así generan aprendizajes y compromisos de acción. En la acción se sigue aprendiendo y comenzando a transformar. Al decir de una de mis clientes, los darse cuenta “te explotan en la cara”. Cada movimiento empodera y genera impacto positivo en unos y en otros. La persona toma las riendas, es más protagonista y hace que las cosas pasen.
¿Qué diferencias existen entre un asesor y un coach?
El asesor clásico diagnostica e indica los caminos a seguir a partir de sus recomendaciones. La base de ese modelo es que él es quien sabe. El coach, en cambio, ayuda a que el gerente –o quien sea de la organización– active sus mecanismos del “darse cuenta”, de tomar conciencia de lo que les está pasando y genere un plan de acción.
Las mejores respuestas no las tiene el coach, sino que él pone una metodología y herramientas al servicio de la organización.
Para no suscriptores, tiene un costo de US$ 40. Por entradas, contactarse con [email protected]
¿Qué errores suelen cometer las empresas? ¿Cómo se evitan?
Muchas tienen bien definidos sus objetivos, incluso bien redactados, pero igual les falta una “vuelta de tuerca” para aterrizarlos y para que el personal tenga claro qué se espera y cómo participar en el desarrollo del objetivo. También es común que se ascienda a personas que son muy buenas en sus cargos, pero no se las prepara, por lo que esas promociones no fluyen y tienen sus costos.
La forma de evitar esos problemas puede ser, precisamente, a través de un coaching ejecutivo, que ayude a esa vuelta de tuerca, o a que la persona se prepare para esa nueva posición, por ejemplo, potenciando su liderazgo, su validación en la organización, u otras variables, según cada caso. Al ser más conscientes de la situación, los propios involucrados hacen los ajustes necesarios.
¿Por qué HCC decidió abrir una filial en Chile?
Porque en Chile el coaching ya es commodity. La necesidad de los gerentes de formarse en coaching está instalada, mientras que en Uruguay es un camino por andar.
¿Cómo funcionarán allí?
El formato será el mismo que en Uruguay, contratando profesionales que nos apoyen, por proyecto. Ya hemos trabajado en Santiago dando entrenamientos in company, pero ahora haremos el desembarco formal como empresa en mayo de 2020 con nuestro primer programa de certificación internacional.
