Restos óseos encontrados en el batallón 14 en junio

Nacional > Desaparecidos

A seis meses y medio del hallazgo, ¿qué se sabe de los restos encontrados en el batallón 14?

Familiares se moviliza este miércoles ante la falta de respuestas y reclama a las Fuerzas Armadas
Tiempo de lectura: -'
20 de diciembre de 2023 a las 05:02

Pasaron 197 días (o 4.728 horas) desde el momento en el que la pala de la retroexcavadora se enterró en el monte del batallón 14 y al subir, entre el gran monto de tierra, saltó la cal y el cráneo salió de la pala, pegó en la máquina y siguió rodando de vuelta a la fosa. Son seis meses y medio desde que la tierra de un predio militar dejó —una vez más— en evidencia la crueldad del terrorismo de Estado ante el hallazgo de los restos casi completos de una mujer desaparecida en la última dictadura. 

16 días después de aquel 6 de junio de 2023, los investigadores le comunicaron a Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos que los restos óseos son de una mujer. Y después de ese dato, poco más se pudo saber. 

Ante la falta de avances en la identificación de los restos, Familiares decidió movilizarse este miércoles en reclamo de respuestas de parte de las Fuerzas Armadas. "Las Fuerzas Armadas secuestraron a nuestros familiares y ellos saben donde están. El presidente, en conjunto con el ministro de Defensa, debe dar la orden para que digan quién es", dijo a El Observador el integrante de Familiares, Ignacio Errandonea. 

La marcha comenzará en la Universidad de la República (Udelar) a las 18:30 y partirá hasta la Plaza Libertad donde se leerá una pequeña proclama. 

En julio la fiscalía y la organización Familiares convocaron a una conferencia para informar que con las muestras disponibles no era posible identificar los restos

¿Qué se sabe hasta ahora? 

La lista oficial de la Secretaría de Derechos Humanos dice que hay 39 mujeres desaparecidas de la dictadura cuyos restos aún no fueron encontrados. De ese universo, 21 nombres fueron descartados porque había suficientes muestras de calidad de sus familiares en la base de datos contra la que se matchean los resultados de ADN.

Entre esas “descartadas” por los estudios genéticos figuraban Elena Quinteros y María Claudia García de Gelman, dos de las tres mujeres que se sabe estuvieron secuestradas en Uruguay y fueron vistas por última vez en territorio uruguayo.

La falta de ADN de muchos familiares obligó a una intensa campaña en los últimos meses para tratar de conseguir la mayor cantidad de muestras posibles. Todas esas nuevas tomas ya fueron a parar al laboratorio argentino que realiza las pruebas genéticas.

Incluso el equipo de trabajo conformado para esta tarea logró, por primera vez, unificar el registro de muestras de familiares que estaba desperdigado en al menos tres laboratorios. En la primera recolección de muestras, cuando Jorge Batlle instaló la Comisión para la Paz, la entonces Policía Técnica comenzó a recolectar muestras. 

Más tarde esa tarea pasó al Instituto de Órganos y Tejidos del Hospital de Clínicas. Y, en paralelo, hubo quienes aportaron sus muestras directo al laboratorio argentino cuando las Abuelas de Plaza de Mayo avanzaron en esa línea investigativa.

"No es sencillo. Hay muchos familiares que fallecieron, víctimas que no tienen familiares directos vivos. Más se aleja el parentesco menos coeficiente de coincidencia hay", explicó Errandonea. 

Probabilidades

Si bien los investigadores no descartan ninguno de los 18 nombres de las que no hay suficiente muestras disponibles, la poca información disponible apunta a una posible víctima: Amelia Sanjurjo. 

De aquella lista de 39 mujeres desaparecidas en dictadura y de las cuales solo tres fueron vistas por última vez en Uruguay, solo a esa trabajadora de la editorial “Mundo Libro” no se le encontró suficientes muestras de ADN con las que contrastar. Y, teniendo en cuenta el modus operandi de los desaparecidos cuyos restos ya fueron hallados e identificados, es más probable pensar en una víctima en territorio nacional que un traslado en el contexto del Plan Cóndor (aunque no se puede descartar nada). 

También la edad de Sanjurjo —41 años al momento del secuestro— y lo que se puede suponer a partir de los restos encontrados afianzan esa hipótesis. 

Sanjurjo no tuvo descendencia. Testimonios dicen que la joven cursaba las primeras semanas de embarazo cuando fue capturada. Sus sobrinos, quienes viven en el extranjero, ya fueron contactados por los investigadores uruguayos y se está trabajando para tomarle muestras de ADN para aportar a la base. Pero, cuando más lejano es el parentesco, menores son las chances de coincidencia genética.

La fallecida madre de Sanjurjo —quien podría ser exhumada para extraer una muestra— no está claro donde está enterrada. Se supone que está en el Cementerio del Norte, dentro de un panteón de la liquidada mutualista Casa de Galicia. El cierre de este prestador de salud hizo que parte de los archivos desaparecieran y no estuviera el listado completo de qué cuerpos descansan en cada urna.

Por si fuera poco, la falta de mantenimiento en ese sector llevó a que —fruto de inundaciones y humedad— el estado de conservación no permitiera un rastreo visual (por ejemplo, leyendo las placas de recordación). Y los libros de necrópolis de la Intendencia de Montevideo tampoco apuntan a un sitio concreto.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...