Uruguay jugó el lunes en el estadio Nilton Santos de Río de Janeiro, la casa del Botafogo, y el club brasileño aprovechó la oportunidad de la presencia de los históricos goleadores celestes, Luis Suárez y Edinson Cavani, para obsequiarles su camiseta personalizada.
Pero no es una camiseta cualquiera, ya que tiene un mensaje especial. En el día que se celebró el Día Internacional del Orgullo LGBT, Botafogo le imprimió una franja con los colores del arcoiris que representa a distintos grupos de la sociedad.
"El objetivo de estas iniciativas y de toda la campaña es difundir entre los vecinos de Botafogo y todos los amantes del fútbol un mensaje de gran impacto contra la fobia y la intolerancia LGBT en el deporte", explicó el club brasileño en sus redes sociales.
En Botafogo jugó Sebastián Abreu, quien firmó un contrato con el club después del Mundial de Sudáfarica 2010 y se convirtió en ídolo de los hinchas.
La selección uruguaya viaja este martes por la tarde en vuelo chárter a Brasilia, donde el sábado enfrentará a Colombia por los cuartos de final de la Copa América.