Una comisión formada por trabajadores de Tienda Inglesa concurrió este miércoles a una reunión propiciada por el
PIT-CNT. Allí, esos delegados plantearon su intención de adelantar las elecciones en el
sindicato del supermercado. Los actuales directivos del gremio están dispuestos a hacerlo aunque no hay acuerdo en la fecha en que se realizarían.
El planteo de los delegados, que están en desacuerdo con la postura de la dirección del Sindicato de Trabajadores de Tienda Inglesa (Sitti), es que las elecciones se efectúen el viernes 13 de octubre, previo a un congreso de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicio (
Fuecys), de la cual forman parte todos los supermercados. Ese congreso se realizará a fines de octubre y en él se elegirá a la nueva conducción de la federación. Es por eso que los delegados buscan definir la situación del Sitti previo al congreso.
"Lo que plantemos es que si las elecciones en el Sitti no son el 13 de octubre, los votos de Tienda Inglesa no se tomen en cuenta en el congreso de Fuecys", dijo a El Observador el delegado del supermercado, Daniel Agosto.
Por su parte, la lista mayoritaria de la conducción del Sitti indicó a través de canales de comunicación con sus afiliados que está dispuesta a fijar las elecciones para marzo del año próximo en lugar de diciembre de 2018 cuando efectivamente deberían llevarse a cabo.
En una situación confusa, los delegados afirman haber cesado a la dirección del Sitti, mientras los dirigentes actuales defienden la postura de permanecer en sus cargos hasta tanto no se elija una nueva directiva.
Las diferencias entre trabajadores y dirigentes del sindicato de Tienda Inglesa comenzaron este año cuando la empresa comunicó su intención de aplicar un recorte de beneficios para los funcionarios del supermercado.
En junio, la dirección del Sitti, acompañada de dirigentes de Fuecys, firmó un preacuerdo con representantes de la empresa sobre la quita de algunos de ellos que días después fue rechazado en una asamblea de trabajadores .
Allí se evidenciaron las diferencias entre los dirigentes y una buena parte de los empleados de la cadena de supermercados.
Finalmente en julio se firmó el acuerdo definitivo que tuvo como mayor impacto la pérdida de una partida en el salario por concepto de devolución del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas que Tienda Inglesa otorgaba a todos sus trabajadores.