José Luis Guerra, integrando el dúo Los Olimareños, y los Eduardos inseparables, Larbanois y Carrero, forman parte de la identidad de la música popular uruguaya de los últimos 50 años, pero muy pocas veces habían compartido escenario. El primer recital que hicieron juntos fue del otro lado del mundo, en Sí dney, Australia, a fines del siglo pasado. No en vano el espectáculo del viernes de noche se llama Histórico.
Pepe Guerra es el más veterano y Carrero lo señala como "uno de los culpables" de que esté haciendo lo que hace hoy. Hubo un golpe de estado de por medio entre las carreras de Guerra, que alcanzó la fama con Los Olimareños, y el dúo. "Ustedes dejaron un espacio y nos metimos nosotros", dice Carrero.
"Nosotros nos tuvimos que ir y ellos aprovecharon", confirma Guerra. "Yo los conocía porque recibía casetes, tanto en España como en México. Sabíamos lo que se estaba haciendo acá, cuando nosotros estábamos con la boca tapada. La de ellos fue una resistencia de gran calidad y valentía", agrega.
Larbanois recuerda el honor que tuvo de tocar con la guitarra de Pepe Guerra en 1969 y coincide con su tocayo en que Los Olimareños son en gran parte responsables de que haya seguido su vocación: "Cualquier queja es a ellos".
El canto popular había tenido un auge hasta principios de la década de 1970 y después, con otros grupos, tuvo otra época de oro durante la dictadura, con un lenguaje diferente, que tenía una sutileza obligada. Con el retorno de la democracia ese auge decayó.
"En los medios se empezaron a cerrar espacios a lo que fuera canción popular", cuenta Larbanois. "Y también hubo una decantación natural, en la que quedó lo que tenía identidad, autenticidad y sustancia, por encima de lo meramente panfletario", agrega.
"Después vino una cantidad de festivales de rock bancados por multinacionales, como una manera de desviar la atención por la canción latinoamericana, pero les salió el tiro por la culata, porque lo que pasó es que el rock sumó su influencia y enriqueció a la música popular", explica Larbanois.
En cuanto al recital del martes en el Teatro de Verano, Larbanois reivindicó el efecto del tiempo sobre la música: "Vivimos en un tiempo donde se dice que lo que se hace hoy, mañana es viejo, pero eso en el arte no funciona. Hay canciones que vos las vas descubriendo con los años: les vas encontrando el saborcito".
"Nosotros estamos cantando canciones que han resistido 50 años", rubrica Guerra. Estarán las canciones clásicas, con una versión del trío Guerra Larbanois Carrero y la participación de Gustavo Montemurro, en teclados y acordeón, Jorge Trasante, en percusión, y Federico Righi, en el bajo.
Respecto de la posibilidad de mantener la continuidad del trío, los tres concuerdan en que no se sabe. "Vos elaborás un espectáculo puntual y cuando querés acordar, el grupo tiene cuatro años", dice Larbanois.
Lo cierto, de momento, es que habrá un trío de referentes de la música popular uruguaya, la noche del martes, en el Teatro de Verano.Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá