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China recupera agilmente producción de cerdos, pero stock sigue en baja
La recuperación en la producción de cerdos en China ha sido más rápida de lo esperado, aunque eso no evitará una caída de entre 15% y 20% en 2020. Otros países del sudeste de Asia también siguen sufriendo los efectos de la gripe porcina africana, enfermedad que también ha afectado –en menor medida– la producción en algunos países de la Unión Europea.
Así surge del último reporte del banco holandés especializado en materias primas Rabobank que prevé que se mantenga el crecimiento en las importaciones de carne de cerdo en el sudeste de Asia, con China a la cabeza.
En el informe del banco se indicó que la gripe porcina sigue presente en China, aunque con un efecto menor al visto anteriormente.
En lo que va de 2020 no se han visto brotes significativos de la enfermedad gracias a mejores medidas de bioseguridad, pero tampoco se prevé que haya una vacuna este año contra la enfermedad.
Si bien no hubo grandes brotes en 2020, este año no prevén una vacuna
Mientras en China la producción caerá entre 15% a 20% respecto al año anterior, en Vietnam y Filipinas la contracción se ubicaría en torno a 10%.
De acuerdo al banco, en 2019 el stock de cerdos cayó entre 35% a 40% en China, un número que es muy cercano al 20% de las existencias porcinas globales.
“La demanda de importaciones seguirá creciendo en estos países en 2020”, afirmaron los técnicos del Rabobank. De acuerdo al banco, en 2020 las importaciones chinas de carne de cerdo llegarán a niveles récord.
Las importaciones de carne de cerdo alcanzaron las 370.000/t en mayo con una suba interanual de 86%.
En los primeros cinco meses de 2020 las compras al exterior de carne porcina treparon a 1,72 millones/t, 146% por encima de enero-mayo de 2019.
A diferencia de los años anteriores creció significativamente las compras chinas de carne de cerdo desde Estados Unidos con la firma del acuerdo comercial entre ambos países.
Para 2020 el Rabobank mantuvo su proyección sobre importaciones china de carne de cerdo por un récord de 3,5 millones de toneladas. El banco señaló que el nivel creciente de compras del exterior elevó considerablemente los stocks de carne congelada en ese país mientras la demanda doméstica no creció a igual ritmo debido al efecto del coronavirus, que afectó especialmente el segmento de food service.
En la evaluación del Rabobank, el ritmo de importaciones disminuirá en el corto plazo para retomar con mayor fuerza sobre el final del tercer trimestre y cuarto trimestre del año cuando se espera una normalización de la actividad.
A un ritmo menor, se continúan reportando casi constantemente focos de fiebre porcina africana en países como Ucrania, Bulgaria, Rumania o Polonia.
Rabobank señaló que en el mercado se preveía un incremento en la producción de carne de cerdo en América del Norte, Brasil y partes de Europa. Sin embargo, el impacto de la pandemia del coronavirus “ha borrado buena parte de esas expectativas”.
