China rehabilitó las importaciones a su país del frigorífico uruguayo Rosario (Rondatel S.A.), casi un año después de suspender su permiso por querer ingresar al país un contenedor con carne uruguaya que tenía recortes de grasa no permitidos, informó el Ministerio de Ganadería (MGAP) en un comunicado.
Rosario fue suspendido el 30 de setiembre de 2021, lo que llevó a que 300 trabajadores fueran enviados al seguro de paro. Fernando Mattos, ministro de Ganadería, informó en ese momento que hubo “una discrepancia entre un producto y su documentación”.
Esto fue descubierto en una revisión de rutina los servicios sanitarios y de aduana en China, que constataron 4.000 kilos de recortes de grasa bovina que no estaban habilitados para la exportación. El funcionario del MGAP que firmó el certificado sanitario con el que esa mercadería se exportó fue inhabilitado.
Desde la cartera indicaron que se llegó a la rehabilitación luego de "un amplio esfuerzo para rehabilitar la planta" por parte de las autoridades del gobierno. Agregaron que en última instancia las autoridades chinas realizaron "una auditoria virtual en vivo de toda la planta".
En Ganadería estimaban que la inhabilitación duraría entre 60 y 90 días, como fue el caso con el frigorífico BPU, suspendido a mediados de abril de 2021 por un cambio en el etiquetado de los productos, y rehabilitado el 1° de julio de ese año.
Tras el error en el etiquetado, el presidente Luis Lacalle Pou relevó a dos funcionarios del MGAP: los veterinarios Eduardo Barre, director de la Dirección General de Sanidad Animal, y Gustavo Rossi, encargado de la Dirección División de Industria Animal.
El 27 de junio de 2021, pocos días antes de la rehabilitación de BPU, fue cesado el anterior ministro de Ganadería, Carlos María Uriarte. Desde el gobierno negaron que su salida estuviese vinculada a la suspensión del frigorífico.