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Coalición cambió de postura y aprobó sueldo de $ 135 mil para titular del Fondo de Solidaridad
El cambio de postura de la mayoría de los legisladores de la coalición y el voto de un aditivo en la mañana de este viernes en la Cámara de Diputados generó sorpresas y hasta alguna molestia dentro del oficialismo.
Diputados del Partido Nacional (PN), el Partido Colorado (PC) y Cabildo Abierto (CA) aprobaron un artículo de la Rendición de Cuentas que otorga un sueldo a quien presida el Fondo de Solidaridad; un puesto hasta el momento honorario.
"Un hecho lamentable", lo describió el representante del Partido Independiente (PI), Iván Posada. El sector colorado Ciudadanos del Partido Colorado planteó esta iniciativa en una reunión de la coalición y fue rechazada por el resto de la coalición. Luego, durante la votación en la comisión de Presupuesto integrada con Hacienda, "apareció una hoja" con el aditivo pero al ser detectada fue quitada.
Sin embargo, esta mañana la propuesta de Ciudadanos fue puesta a votación en el plenario y fue aprobada. El diputado del PI no se encontraba en sala. "Si no, hubiera nuevamente saltado”, aseguró.
Tampoco se encontraba ya en cámara el diputado de Cabildo Santiago Cal, que consultado por El Observador se mostró muy sorprendido porque sus correligionarios hubiesen apoyado la propuesta. "Qué increíble. Se había acordado no votarlo", aseguró. Cal hizo referencia a que el aditivo lo redactó la diputada de Ciudadanos María Eugenia Roselló, quien propuso el nombre de la actual presidenta del Fondo de Solidaridad, Rosario Cerviño.
Rafael Menéndez, también diputado de CA —y que estaba en sala— señaló a El Observador que fue el coordinador de su bancada, Eduardo Lust, quien les explicó por qué debían votar el aditivo.
La diputada Roselló, días antes de que se votara el aditivo, dijo a El Observador que había llegado a un "acuerdo con el Partido Nacional".
Según la legisladora, el cargo de la presidenta del Fondo de Solidaridad fue puesto por Ciudadanos y gestionarle un salario fue parte del compromiso que asumieron en esa negociación.
La presidenta –afirmó Roselló– "va al fondo tres veces por semana, firma cheques por millones de pesos, y no cobra". "Necesitamos un control ejecutivo en el Fondo de Solidaridad, y por eso se buscó ese cambio de rosca, un cambio ejecutivo. No se consigue que alguien trabaje gratis y sea profesional", agregó. El salario votado asciende a unos $ 135 mil pesos nominales.
La reunión de Da Silveira
"Nos parece que realmente es un hecho lamentable —dijo Posada— porque indudablemente esto no vino como un planteo del Poder Ejecutivo, más allá de que lo que se dice es que tiene el apoyo del ministro de Educación y Cultura (MEC)", sostuvo.
Justamente, Posada hizo referencia al MEC, porque el presidente del Fondo de Solidaridad representa a esa cartera. Sin embargo, con este aditivo el sueldo se paga con dinero del propio Fondo. "Es el ministerio el que tiene que hacerse cargo", aseguró Posada, y en este sentido criticó que el ministerio Da Silveira se pusiera en contacto con los diputados nacionalistas y los instara a votar el aditivo.
Este miércoles, el jefe de la cartera fue al Palacio Legislativo y se reunió con el conjunto de diputados del PN "para hablar del conjunto de los artículos", explicó el ministro. "Se discutió este punto entre otros", subrayó Da Silveira consultado por El Observador.
"Es una iniciativa que se toma con el apoyo del ministerio de Educación y con el visto bueno del Ministerio de Economía para subsanar un problema de diseño institucional. Hasta ahora el Fondo de Solidaridad tiene un directorio honorario, —incluyendo al presidente—, un staff profesional, —con un gerente que recibe muy buenas remuneraciones—. Esto ha conducido históricamente a que los que están todo el día ahí presentes en la organización son los funcionarios rentados, los no rentados tienen que dedicarse a otras cosas, apenas tienen poco tiempo más allá del que requieren las reuniones de directorio", señaló el ministro.
"Conduce a una cosa poco saludable: que la orientación del funcionamiento de la organización termine en manos de funcionarios rentados y no en manos las personas que fueron designadas por los ciudadanos para que asuman la responsabilidad de conducción", continuó.
La idea es que el presidente cobre un sueldo "para tener una mirada ciudadana sobre lo que el staff técnico está haciendo y para informar al resto de directores sobre lo que se está votando". El ministro reconoció que lo ideal sería que todos los directores del Fondo cobraran también, pero eso supondría "una carga pesada para los contribuyentes".
Sobre la idea de Posada de que el MEC pague el sueldo del presidente, Da Silveira sostuvo que "nunca se discutió porque el conjunto de los sueldos del fondo de solidaridad salen de lo recaudado por el fondo de solidaridad". El Fondo de Solidaridad es un organismo deficitario.
