Conciencia presente para un futuro sustentable

Jefe de Medio Ambiente & Responsabilidad Social Empresaria en Cementos Artigas S.A.

Desde 1974, cada 5 de junio se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente y se ha convertido en una plataforma para generar conciencia y fomentar acciones orientadas a los temas que globalmente son considerados más urgentes. Este año, la campaña se centra en prevenir, detener y revertir la degradación de los ecosistemas.

En nuestro país, uno de los temas que han sido definidos como prioritarios es la gestión de residuos lo cual puede tener un gran potencial de afectación a los ecosistemas en caso de malas prácticas de disposición. En este sentido, las empresas tenemos una gran responsabilidad, no solamente por ser generadoras de residuos —pues todos los integrantes de nuestra sociedad lo somos—, sino también por tener la capacidad de consolidarnos como uno de los actores fundamentales en las soluciones ambientales.

En Cementos Artigas, estamos convencidos de este rol, constituyendo hoy nuestro proceso productivo en una alternativa sustentable valorizando una gran cantidad de residuos provenientes de otras industrias y de la sociedad, aprovechándolos como combustibles y como materias primas que aportan elementos fundamentales en dicho proceso. Tal es el caso del empleo de aceites usados, aguas de sentinas de barcos, neumáticos y cámaras fuera de uso, cáscara de arroz, chips de madera, aserrín, pallets, envases y materiales plásticos diversos, entre otros. Esto tiene un triple beneficio ambiental: el de reducir el consumo de materias primas naturales y combustibles al sustituirlos, el dar un destino ambientalmente adecuado y reaprovechamiento de residuos generados en otros puntos, y finalmente, la disminución de la huella ambiental de nuestros productos y reducción de emisiones de CO₂. Es un trabajo de análisis y rediseño continuo de los procesos y productos que alentamos y apoyamos también a todas las empresas a llevar a cabo en sus organizaciones.

Más allá de la tecnología, procesos e innovación que involucran todas estas acciones, es importante reflexionar individualmente acerca ¿de dónde surge y cómo ha devenido nuestra existencia para que cuestiones fundamentales como evitar el deterioro de nuestro propio hábitat requieran de una gran intervención? La falta de una visión integrada de nuestro ser al “todo” que nos rodea podría ser tal vez una de las principales causas, y que ésta, a su vez, provenga del no reconocimiento de nuestra verdadera esencia y propósito de vida. La visión del mundo basado en un éxito materialista ha llevado a alejarnos de nuestra propia naturaleza y humanidad; el consumo ha explotado y, con ello, el desecho también.

Gandhi decía que nuestro mundo tiene la capacidad de proveer lo suficiente para satisfacer las necesidades de todos, pero no la codicia de todos; y esta frase nos interpela a auto-observarnos en nuestras pequeñas o grandes acciones cotidianas también. Nuestras búsquedas inagotables de seguridad y entretenimiento, generan un constante “querer tener” sin dejar siquiera un espacio para el desarrollo del “querer ser”. Pero así también el gran intelecto que nos ha dado la propia naturaleza nos permite tener anhelos más elevados en nuestra vida y, para ello, es fundamental trabajar en el desarrollo de nuestra conciencia, pues hace falta reconocer con urgencia máxima que no es posible concebir un futuro sustentable sin un presente consciente. Al fin y al cabo, en palabras de Sri Mata Amritanandamayi Devi, “No es lo que recibimos sino lo que somos capaces de dar lo que determina el valor de nuestra vida”.