El gobierno de la región autónoma española de Cataluña aseguró hoy que le llegó un aviso de un posible atentado en La Rambla de Barcelona, pero "por otras fuentes", no por la CIA, y que, tras contrastarlo y valorarlo, se concluyó que tenía una "muy baja credibilidad", según EFE.
El responsable de Interior de Cataluña, Joaquim Forn, afirmó en una rueda de prensa que su departamento comunicó este aviso al gobierno español, que tampoco dio "veracidad" a la amenaza, por lo que no se habló de ello en las reuniones de las mesas de evaluación antiterrorista del 25 de mayo y el 8 de junio pasados.
La reacción sucedió debido a una información que hoy publica El Periódico de
Cataluña, en la cual se asegura
que la Policía catalana recibió una alerta de la CIA el 25 de mayo, que avisaba de que el Estado Islámico (EI) planeaba actuar en verano, "específicamente en La Rambla", calle barcelonesa donde los yihadistas cometieron un atentado el 17 de agosto, con 15 muertos. Tras la publicación,
han surgido dudas acerca de la veracidad de la información que El Periódico, uno de los medios más conocidos de la región, dio a conocer.
La supuesta nota de la CIA llegó ese día al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) -los servicios secretos españoles- y a las fuerzas de seguridad del Estado español, que a su vez informaron a las fuerzas de seguridad de Cataluña.
A pesar de todo, sí se amplió el dispositivo de seguridad en La Rambla, según Forn, que denunció una campaña de "intoxicación y desprestigio" contra la Policía catalana y acusó a El Periódico de "montaje".
Destacó que, días después del atentado en La Rambla, el Gobierno español confirmó al catalán que ninguno de los avisos recibidos con anterioridad sobre la amenaza terrorista tenía relación con los atentados perpetrados finalmente en Barcelona y Cambrils.
En medio de la mañana terció Wikileaks, organización que a través de su líder, Julian Assange, puso hoy en duda la veracidad de la alerta que la CIA envió el 25 de mayo a la policía regional de Cataluña sobre un posible atentado yihadista en La Rambla de Barcelona en verano. "Periódico publica información altamente sospechosa sobre el ataque de ISIS en Barcelona, con el referéndum catalán a la vista", señala el tuit:
Wikileaks, que ha filtrado numerosos documentos secretos, señala en su cuenta en Twitter que "el diario publica un documento de la inteligencia de EEUU altamente sospechoso sobre un ataque del EI en Barcelona justo antes del referendo catalán" del 1 de octubre.
En su tuit, Wikileaks avisa de algunos errores de la alerta como el uso del acrónimo "ISIS" (
Estado Islámico) utilizado por los medios de comunicación en vez de "ISIL", como es común entre los servicios de inteligencia, o "Irak", en vez de "Iraq". Assange pidió además la dimisión del director de El Periódico, Enric Hernández.
Otros políticos catalanes se hicieron eco del asunto:
El manejo de la información sobre atentados en
España no está exento de polémica: el 11 de marzo de 2004, tras la explosión de bombas en la estación de tren madrileña de Atocha, El País de Madrid tituló que el suceso había sido una "matanza de ETA", en referencia a la organización terrorista de procedencia vasca, cuando en realidad horas después se comprobó que se había tratado de un atentado organizado por Al-Qaeda.
En su momento, se habló de injerencia del gobierno en el manejo de la información y el tema vuelve a aparecer ahora, con el nuevo referéndum independentista en Cataluña a pocos días de suceder (la fecha estipulada es el primero de octubre).
Fuentes de la embajada estadounidense en Madrid eludieron hacer comentarios a EFE sobre la alerta de la CIA o sobre su veracidad, amparándose en que la ley prohíbe hacer declaraciones sobre asuntos de inteligencia y el Gobierno de EEUU "nunca ha comentado nada" sobre las filtraciones o argumentos de Wikileaks.
Fuentes de la lucha antiterrorista confirmaron hoy a que recibieron el aviso de la CIA y subrayaron que afectaba "única y exclusivamente al ámbito de la prevención en materia de protección de seguridad ciudadana", por lo que consideraron que la policía regional debía haber reforzado La Rambla durante los meses de verano.