Cuatro mentiras disfrazadas de consejos para mejorar la productividad

Por ejemplo, el fundador de Strategic Performance Group, David Findel, no cree que levantarse muy temprano sea necesariamente un buen consejo para mejorar la productividad. Así lo explicó a la revista Fast Company: "Si te levantas a las 4 de la mañana es maravilloso. ¿Pero qué estás haciendo realmente? Sin un propósito es tan inútil como despertarse al mediodía". 

Aquellos consejos que prometen ser verdades universales, suelen ser malos consejos, según Findel.

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A continuación, cuatro mentiras acerca de mejorar la productividad:

1. Hay solo una forma correcta de hacerlo

La entrenadora de vida y empresaria Kate Swoboda aconsejó ser escéptico cuando alguien le receta una fórmula específica o límite de tiempo para realizar una actividad. No hay que privarse de los beneficios de hacer algo (como meditar), aunque sea por un momento, debido a aquellas recomendaciones estrictas. 

2. Rodeate de personas positivas

Aunque superficialmente parece un buen consejo -ya que nadie quiere estar siempre rodeado de pesimistas- Swoboda sostuvo que si se buscan solo personas que ven "el vaso medio lleno" o que tengan mentalidades similares a la de uno, se corre el riesgo de perderse los "dones" de la negatividad. 

"Las personas con un estilo más pesimista es posible que puedan ver dificultades y preocupaciones que aquellos con lentes color de rosa no ven", dijo. Según la experta, algunos conflictos pueden impulsar a la mejora y la búsqueda de soluciones. 

3. Hay un "truco" para todo

Los consejos sobre "trucos para" lograr determinados objetivos abundan. Sin embargo, no siempre hay atajos, dijo el CEO de la firma de coaching ejecutivo Reboot, Jerry Colonna. "No siempre podés hacer algo de forma simple y hacer que tu vida se acomode". 

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"Lo que me preocupa es cuando infundimos esa actividad con un sistema de creencias que es todo lo que tenemos que hacer", señaló. Hacer cambios en tu vida es un trabajo duro. “Comprender qué es el bloqueo, comprender lo que te detuvo, es el primer paso. Y luego, creando repetidamente estructuras que pueden apoyarlo en la transformación, eso es lo que hará que la transformación se mantenga ", apuntó.

4. Confiá en el proceso

Desglosar los objetivos en una lista de tareas y luego establecer un proceso suena atractivo y simple. Pero para lograr ciertos objetivos y "mover la aguja en el crecimiento personal y efectividad" se necesita contexto, medición y compromiso, señaló Findel. "Simplemente seguir un proceso no es suficiente"

Entender por qué se quiere lograr algo, conocer los obstáculos que se interponen y lo que se hará para superarlos son todos factores a considerar en la lista de tareas, añadió.  Luego, a medida que se avanza, hay que tener en cuenta lo que funciona y revisar lo que no sirve.