El dólar abrió a la baja este martes, al tiempo que los principales índices accionarios de Estados Unidos ensayaban una tímida recuperación tras el desplome sufrido el lunes por la incertidumbre reinante entorno a la expansión del coronavirus y sus potenciales efectos en la economía global.
En la pizarra al público del BROU el dólar se situaba este mediodía a $ 44,40 para la compra y $ 46,60 para la venta, 15 centésimos por debajo del cierre del lunes. En los cambios privados el billete verde se vendía en la franja de $ 47.
El Banco Central (BCU) intervino el lunes vendiendo US$ 19,5 millones en el mercado spot, durante una sesión que tuvo negocios por US$ 52,5 millones. En el interbancario la suba promedio fue de 2,46%.
A nivel regional, el real caía 0,78% frente al dólar y cotizaba a 5,0405. La moneda estadounidense se disparó el lunes en el mercado norteño un 4,47% y sobrepasó la barrera de los 5 reales.
Por otra parte, en Wall Street el Índice Dow Jones subía 0,34%, el Standard & Poor's 500 lo hacía 1,85% y el Nasdaq 1,94%.
Los futuros de petróleo Brent (referencia de Ancap) cotizaban en US$ 29,7 con descenso de 1,26%. El crudo es rehén, por un lado, de una demanda mundial a la baja producto de las medidas adoptadas por los países para detener el contagio de coronavirus, y por el otro, de la guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia, que no alcanzaron un acuerdo para un recorte de producción adicional respaldado por Riad para detener la caída de precios.
Las bolsas europeas volvían a operar con pérdidas, bajo el inquietante signo del coronavirus, pese a una dinámica y esperanzadora apertura, y al mejor comportamiento de las bolsas de Asia y Pacífico.Tras un histórico derrumbe la bolsa de Sydney ganó 6%, y la de Tokio frenó sus cuatro caídas consecutivas para cerrar casi en equilibrio.
En Europa predominó el verde en los primeros intercambios del martes, pero rápidamente se invirtió la tendencia: Paris perdía 1,86%, Francfort 3,30%, Milán 1,73%, Madrid 0,21% y Londres 2,79%.
Los inversores esperan "que los gobiernos alimenten a los particulares y a las empresas con suficiente liquidez para sobrevivir al bloqueo que genera el coronavirus", analiza Jasper Lawler, de London Capital Group.
Pero nada está garantizado pues, como recuerda Michael Hewson, analista de CMC Markets, "tras años de promesas sin efectos, la confianza de los inversores en la capacidad del G7 de estar suficientemente unido para desplegar un 'bazuca' fiscal coherente es limitada".
Los bancos centrales también hicieron todo lo posible para limitar la crisis, pero los mercados siguen insensibles a esos intentos, como al del banco central de Estados Unidos (Fed) que anunció el lunes una operación en el mercado monetario de US$ 500.000 millones, tras reducir de forma brutal su principal tipo de interés a 0%-0,25% y decidir una inyección de liquidez de US$ 700.000 millones.
(Con información de AFP)
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