Ecuador: El movimiento indigenista denuncia “falta de voluntad” del gobierno para el diálogo

Lo afirmó Mariana Yumbay, integrante de los equipos técnicos de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), al término de los primeros 30 días de las  negociaciones, que también incluyen a la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) y al Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine).

Según detalló Yumbay, en las reuniones con los delegados del Ejecutivo hubo avances mínimos en 3 de los 10 puntos que motivaron el paro nacional. A modo, y según informó el diario local El Universo, Yumbay señaló que el Banco Central emitió una resolución para revisar la condonación y moratoria de créditos a microempresas y pymes que los propios funcionarios de la entidad dicen desconocer.

Con relación a los subsidios a los combustibles, uno de los puntos centrales que motivaron las protestas, las conversaciones “están paralizadas”, y lo único que se hizo fue crear una submesa técnica para buscar una solución, denunció Yumbay.

Mientras tanto, en la mesa de control de precios y especulación, el movimiento indígena resolvió declarar “suspendidos” los diálogos hasta que el Gobierno decida rever su decisión de no fijar precios referenciales a 44 productos de primera necesidad.

“Haciendo un balance, no se ha avanzado mucho; y no es por las organizaciones, porque se trabajó con propuestas. Al contrario, es el Ejecutivo el que no tiene respuestas. Recién en las mesas de diálogo preparan respuestas que no satisfacen las aspiraciones de las organizaciones sociales”, comentó Yumbay.

Otros actores, como Samuel Lema, dirigente de la Feine, se mostraron preocupados porque la mesa de control de precios se “suspendió” al no haber respuestas. En ese sentido, la vicepresidenta de la Conaie, Zenaida Yasacama, recalcó que “no hay voluntad política” del Ejecutivo para atender los planteos: “No estamos teniendo resultados, y eso es preocupante”, apuntó.

Por lo pronto, y a pesar del tiempo transcurrido, las partes todavía tienen pendiente instalar otras siete mesas: Fomento productivo; Empleo y derechos laborales; Energía y recursos naturales; Derechos colectivos y educación superior; Protección a inversiones nacionales; Acceso a la salud y Seguridad y justicia.

Por su parte, en un intento por evitar el fracaso de las negociaciones, el secretario de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), David de la Torre, quien actúa como garante del proceso, anunció que presentará un cronograma antes de los 60 días que restan del plazo que se dieron las partes para plasmar las reivindicaciones indígenas.

Mientras tanto, Leonidas Iza, el titular de la Conaie y figura central en las protestas que sacudieron al país, le reclamó al gobierno que “desclasifique” a información sobre los incidentes que dejaron un saldo de 6 muertos, 331 heridos y 125 detenidos para descartar la teoría de que hubo violencia por parte de los manifestantes y ofrecer una “reparación integral para las víctimas”.

Lo dijo en el marco de la recorrida que viene realizando desde hace quince días por varias provincias de la región andina para divulgar entre las bases del movimiento indigenista los resultados de las conversaciones con el Ejecutivo y tras haber participado en la localidad de Chimborazo del funeral de Juan Sislema Minta, quien falleció luego de haber permanecido en coma por varias semanas, supuestamente herido por perdigones durante las protestas.

En tanto, el presidente Lasso viajará el martes a Estados Unidos para someterse en la ciudad de Houston a estudios médicos, luego de una cirugía menor que le realizaran en un párpado días atrás y regresará al país el 21 de agosto, según informó la secretaría General de Comunicación.

Será el segundo viaje que realizará a Estados Unidos por cuestiones de salud. Lasso, de 61 años, viajó en junio del año pasado, en esa ocasión para someterse a una operación en la que le retiraron un quiste en el área lumbar producto de una mala práctica médica ocurrida años atrás y que lo obligaba a usar bastón.

El anuncio del mandatario se conoció el mismo día en el que los movimientos indígenas y sociales le reprocharon al gobierno su "falta de voluntad política" y denunciaron “avances mínimos” en las mesas de diálogo creadas hace un mes bajo la mediación de la Iglesia ecuatoriana.