El grupo está unido hasta cuando no son convocados

Los futbolistas de la selección llegaron al hotel Bourbon de Asunción alrededor de la hora 18.15. Se instalaron en sus habitaciones y ahí se quedaron, sin tener contacto con los uruguayos que se acercaron al hotel o que están hospedados allí.

El Bourbon es un hotel cinco estrellas que construyó la Conmebol y está ubicado en Luque, a media hora del centro, enfrente a la sede del organismo que administra el fútbol continental.

Una hora después de que arribó el plantel celeste, llegaron juntos los futbolistas Mauricio Victorino y Álvaro Pereira, quienes defienden a Cerro Porteño. Victorino está cumpliendo una pena por dopaje y Palito se recupera de una lesión.

"Va a ser un partido difícil como lo son siempre acá en Asunción, pero confío en los jugadores de la selección", alcanzó a comentar el ex futbolista de Nacional.

Los dos son parte del proceso de Tabárez que comenzó a andar en 2006. Victorino jugó por última vez en los dos partidos de marzo de 2016, frente a Brasil y Perú, mientras que Pereira lo hizo en octubre del año pasado, ante Venezuela y Colombia.

Un rato más tarde también llegó el golero de Libertad Rodrigo Muñoz, quien fue convocado en los primeros partidos de la competencia, pero no ha jugado.

También hay otra gente del fútbol hospedada en el mismo hotel de los celestes, como el ex dirigente de Nacional José Fuentes, el directivo de Peñarol Edgar Welker y el entrenador Manuel Keosseian. Dejando las pasiones de lado, el lunes se fueron a cenar juntos.