El interior fue el gran protagonista de la recuperación del empleo en 2021

Este martes, el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó los datos de diciembre de actividad, empleo y desempleo, que dieron un cierre positivo al balance de 2021, tras el fuerte shock que provocó el covid-19 sobre el mercado de trabajo el año previo. 

En diciembre, la tasa de actividad se situó en 62%, la tasa de empleo en 57,7% y la tasa de desempleo en 7% —su menor nivel desde diciembre de 2017—.

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El CED estimó que en 2021 la economía uruguaya tendrá una expansión de 4,4% (el dato oficial se conocerá en marzo), por lo que "por cada punto de crecimiento se generaron unos 11 mil puestos de trabajo", según el documento. Se trató de "el año con mayor cantidad de nuevos puestos generados desde 2011" . Además, la cantidad de ocupados a fines de 2021 superó en 9 mil los niveles previos a la pandemia. 

Por lo tanto, "Uruguay recuperó tras 18 meses la totalidad de los puestos de trabajo perdidos durante la crisis sanitaria (en torno a 108 mil)", destacó el centro de estudios.

El interior fue el gran motor 

Con el detalle puesto es la dinámica regional, el informe observó que la mayor parte del empleo se generó en el interior del país. Según la institución, el 90% del empleo total generado fue absorbido fuera de la capital. Montevideo apenas aumentó su promedio en 5 mil empleos en 2021.

El estudio señaló que "la brecha de empleo entre ambas regiones alcanzó su menor nivel desde 2013 y se ubicó en valores históricamente bajos" y consideró que puede deberse a "el gran dinamismo que mostraron los sectores agroindustriales y su efecto derrame sobre la actividad y el empleo —típicamente más concentrado en el interior del país—".

De hecho, en épocas favorables para el sector agroindustrial como la registrada entre 2004 y 2014 con el boom de precios de los commodities en los mercados internacionales, la brecha de empleo entre Montevideo y interior del país ha tendido a ser menor, situación que podría volver a acentuarse, según el CED. El 2021 pautó una fuerte valorización de los productos agroindustriales de exportación. Las ventas al exterior de bienes superaron los US$ 11.500 millones y marcaron un récord, dinamismo que se mantuvo en el arranque de este año con una expansión de 31% interanual en enero. 

Cómo le fue a la masa salarial y qué esperar a futuro 

Esta semana el INE también dio a conocer los datos del Índice Medio de Salarios (IMS) que, descontados de la inflación, dejan como resultado la evolución del salario real. El poder adquisitivo del salario de los uruguayos empeoró en 1,56% en 2021 por segundo año consecutivo. Sin embargo, hay un indicador que reúne el desempeño de los salarios con el del empleo, para medir en total cuánto recibieron los uruguayos en remuneraciones: la masa salarial.

"Con la pandemia, la masa salarial se recupera (parcialmente) porque lo hace el empleo, a pesar de la caída del salario real. En el fondo, la economía experimentó una ganancia de productividad, aunque más producto de su posición cíclica que por factores estructurales o de oferta", indicó el CED en su informe. 

De acuerdo al CED, la masa salarial y el PIB "volvieron a presentar variaciones de igual signo lo cual denota estabilidad de la participación de las remuneraciones del trabajo en el ingreso". No obstante, a diferencia de los últimos años, el diferencial entre el crecimiento del PIB y los salarios reales estuvo alejado del crecimiento promedio del empleo.

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"Lo anterior supone que existe un espacio importante de mejora para la recuperación salarial tras dos años consecutivos de caída. De hecho, hacia fin de año se firmaron muchos convenios salariales por encima de las pautas del gobierno, lo cual sugiere que, o bien algunos sectores tuvieron desempeños mejores a lo esperado y por tanto presentaron mayor holgura a la hora de los ajustes salariales, o bien que la expectativa de inflación futura de empresarios y trabajadores es mayor a la del gobierno", explica. 

La calidad del empleo

A pesar de las buenas noticias, todavía queda un flanco débil en materia de la recuperación del mercado de trabajo, que se refleja al mirar más de cerca la calidad de los empleos recuperados.

El CED observó que la tasa de subempleo "se ubicó en los niveles más altos desde 2008, por lo que aproximadamente 159 mil personas deseaban trabajar más horas, pero no lo conseguían".

Además, el informe advirtió que aunque las cifras en general son muy buenas en cuanto a la recuperación de niveles de prepandemia, la comparación con esas cifras "está 'contaminada' por un punto de partida deteriorado". "Previo a la pandemia la economía atravesó un proceso de escaso crecimiento económico con pérdida de puestos de trabajo (53 mil en el quinquenio 2015-2019)", explicó.