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El paso a paso de Lacalle Pou para conformar su fórmula
La fórmula “Luis, Beatriz” acompañada del eslogan “es ahora” apareció proyectada en pantalla gigante en el escenario ubicado en la puerta de la casa del Partido Nacional pocos minutos después de que el candidato blanco Luis Lacalle Pou anunciara públicamente que su compañera de fórmula era Beatriz Argimón. Si bien la foto que acompañaba sus nombres era del momento, el texto fue escrito algunos días atrás. Pero como ni Lacalle Pou ni su equipo podían asegurarse antes del domingo una victoria que les permitiera ser quienes definieran la candidata a vicepresidenta, había un plan B en el que solamente estaba escrito el nombre del ahora candidato.
Dos personas de su comando de campaña llevaban cada una un pendrive en los bolsillos. Uno de ellos tenía el pendrive con la fórmula que sería proyectado en caso de que la diferencia con los demás precandidatos le permitiera armar la fórmula. El otro se usaría si resultaba ganador pero con poca diferencia con el segundo. “¡No nos vayamos a equivocar!”, bromeaban entre el nerviosismo en su equipo.
La historia de los pendrives parece tan solo una anécdota pero explica cómo se gestó la candidatura de Argimón a la vicepresidencia. El primer paso fue probarla en un rol ejecutivo y de articulación. Y para eso, Lacalle Pou no encontró mejor lugar que el de la Presidencia del directorio. No en vano, fue el principal responsable de que en abril del año pasado asumiera como la primera presidenta mujer del directorio nacionalista en un partido con más de 180 años de historia.
“Ahí ella empieza a tener una actitud que va de la mano con el cargo que ahora el partido le hace el honor de tener. Tuvo una actitud equidistante, negociadora, no participó en listas sectoriales y participó de actos de todos los precandidatos. Y realmente hizo de colchón de algunas situaciones”, contó Lacalle Pou en entrevista con Claves Políticas de Nuevo Siglo TV.
Dos semanas antes del domingo, Lacalle Pou le comunicó a Argimón su intención de que fuera la candidata y la presidenta del partido le dio el sí. De todos modos, el candidato también manejaba como opción al intendente de Colonia, Carlos Moreira –de las filas de Jorge Larrañaga, un nombre que ya había sonado en las elecciones pasadas-. Sin embargo, la última palabra se diría a partir de la publicación de los resultados electorales.
Dos días antes de la votación, Lacalle Pou se reunió con todos los precandidatos. Entre el viernes y el sábado tuvo un mano a mano con Larrañaga primero, Enrique Antía después y por último con Juan Sartori.
Con Larrañaga fue directo. Sin pelos en la lengua le dijo que tenía dos candidatos a vice y su nombre no estaba entre ellos, indicaron a El Observador allegados a Lacalle Pou. Acto seguido, le contó que Moreira y Argimón eran sus opciones, con la presidenta del directorio como favorita. También manejó que ese plan iba a ser puesto en acción si sacaba una diferencia holgada con sus competidores.
Lo mismo ocurrió con Antía y el intendente de Maldonado lo aceptó, aunque le pidió que tuviera en consideración al intendente de Tacuarembó, Eber Da Rosa. Lacalle Pou le respondió que lo tendría en cuenta pero reiteró que el caudal de votos era el que mandaba.
El sábado se vio con Sartori y allí encontró un poco más de resistencia. Tal como había dicho meses atrás en una entrevista en Diario de campaña de Nuevo Siglo TV, Lacalle Pou le dijo cara a cara que ni él ni Verónica Alonso serían sus candidatos a vice en caso que él consiguiera una diferencia lo suficientemente amplia como para decidir. Sartori no se molestó pero sí le indicó que había que ver cómo votaba cada uno el domingo porque no estaba nada dicho.
La decisión sí causó un poco de malestar en el entorno del empresario, que terminó obteniendo muchos menos votos que el ganador de la interna (54% contra 21%). “Debería haber ocupado la vicepresidencia. Nunca había pasado que se lo deje de lado al segundo. Nos hubiera gustado que fuera vicepresidente. Hubiera sido muy interesante un Lacalle Pou-Sartori. Pero es una decisión del candidato electo con amplio margen y tiene prerrogativa de hacerlo”, dijo a El Observador Óscar Costa, director de campaña del empresario,
El día después de la elección y con los números sobre la mesa, Lacalle Pou agradeció que los demás precandidatos le facilitaran el camino, lo cual posibilitó que el Partido Nacional fuera el único en terminar la noche del domingo con una fórmula consolidada. Según contó en Claves Políticas, una vez conocidos y después de conversar con su equipo técnico y los líderes de las agrupaciones del sector Todos, hizo “cuatro llamados a compañeros importantes del partido”, tres de los cuales eran los precandidatos. Fue el momento de confirmar la fórmula y primó el acuerdo. “Ya había un anticipo de los planes. Fue en etapas. La decisión final fue el domingo”, resumió.
El pendrive con la imagen que solo tenía su nombre quedó en el olvido.
La llamada del presidente
La relación entre el presidente Tabaré Vázquez y Lacalle Pou fue fría y casi inexistente durante esta administración. Según dijo Lacalle Pou a Telemundo hacía cinco años que no hablaban pero con la victoria del candidato blanco confirmada esa historia cambió por algunos segundos, gracias a un gesto del presidente. Las intenciones del mandatario de llamarlo le fueron comunicadas al comando de campaña del líder blanco a través del equipo del candidato frentista Daniel Martínez, con quien ya había hablado para felicitarse mutuamente.
La llamada con el mandatario duró algunos segundos y se limitó a un “felicitaciones” por parte del mandatario, que Lacalle Pou agradeció. El llamado desde Presidencia llegó prácticamente al mismo tiempo que la comunicación con el candidato por el Partido de la Gente, Edgardo Novick.
