El uruguayo al que se le rompió la Mac, contactó a Tim Cook y le dieron una sorpresiva solución

Un día se percató que su Mac empezó a inflarse. Googleó por qué sucedía esto y en diferentes foros advertían que se trataba de una falla de la batería del dispositivo. En algunos portales indicaban que hasta podía prenderse fuego.

Decidió llamar a Apple para que la revisaran. Le dijeron que esa examinación tendría un costo de US$ 750. Ignacio les dijo que el problema no había sido ocasionado por él, sino que consideraba que obedecía a una falla de fábrica.

Se negó a pagar esa cifra y decidió ir a una tienda oficial de Apple. En esa visita, le corroboraron lo que él presumía: “No es error tuyo, es un problema de fábrica”, le dijeron. Él le dejó la Mac y le respondieron que en un plazo de tres a cinco días el inconveniente estaría solucionado.

“En ese momento estaba cerrando un videojuego”, contó a Cromo. Si bien tenía una computadora de respaldo, la Mac que utilizaba contaba con mejores prestaciones para llevar a cabo su tarea.

Llamó un viernes y le indicaron que el lunes estaría pronto el arreglo. Ese día volvió a comunicarse y no hubo noticias positivas. Todos los días de esa semana llamó a Apple preocupado sobre qué había sucedido con su Mac. “Cada operador me indicaba una cosa distinta”, relató.

Lejos de cansarse por la no solución de su inconveniente, pensó: “¿Y si le escribo al CEO de Apple, Tim Cook?”. Había leído en una entrevista que él lee los correos electrónicos que le envían las personas. Ignacio lo consiguió en Google "en menos de 10 segundos".

En ese correo, le describió el inconveniente y la peripecia que atravesó durante esos días. Desde Apple le contestaron que sería mejor conversarlo por teléfono.

Tras contarle nuevamente la historia, le dijeron que lo volverían a llamar en 20 minutos para darle una solución definitiva. “En tu Apple Store más cercana te darán una Mac nueva”, le indicaron.

Cuando acudió al lugar, le dijo a una de las funcionarias que acababa de hablar con el equipo de Tim Cook y que había una Mac a su nombre. Ella lo miró absorta sobre lo que le acaba de comentar. Tras chequear con su supervisor, verificó que era cierto y pudo hacerse de su nueva herramienta de trabajo, que era más poderosa que la que tenía hasta entonces.

González, que ha trabajado para la música de algunas películas de Netflix y de numerosos videojuegos, se mostró sorprendido que el equipo de Cook estuviera pendiente del tema. “Están en la frontera del conocimiento, en desarrollo de chips e inteligencia artificial. Están en la punta del conocimiento. Mi caso era una laptop era un tema mega ínfimo. Están en todos los detalles. Eso me dejó muy sorprendido”, concluyó.