El ministro de Agroindustria argentino, Ricardo Buryaile, admitió este lunes que hay escasez de manteca en los supermercados del país, un problema que achacó a la decisión de los empresarios del sector de reducir la producción de este alimento ante la subida del precio de la leche.
En declaraciones a la radio local Uno, el dirigente se refirió a las dificultades que atraviesan los productores de
leche en
Argentina en los últimos meses por las "inclemencias climáticas y la subida de los precios internacionales", al tiempo que aprovechó para criticar a la gestión del gobierno anterior.
"En los buenos momentos de precios, el gobierno anterior se quedó con la plata que debía guardar para estos momentos", lamentó el titular de Agroindustria, quien opinó que el anterior Ejecutivo de la expresidenta
Cristina Fernández (2007-2015) no construyó infraestructuras que abarataran los costos de transporte.
Para Buryaile, la escasez de este alimento en los supermercados se debe a la decisión de los productores, que, ante los altos precios y la caída de demanda, optan por elaborar queso, ya que lleva menos leche que la manteca.
Aunque adelantó que van a mediar con todos los eslabones de la cadena productiva, el ministro advirtió que la intervención del Estado tiene un límite y "si alguien quiere vender más caro" el gobierno "no tiene la facultad de hacer nada", siempre y cuando no cuente con una posición de superioridad en el mercado, explicó.
"Controlar los precios con una pistola encima de la mesa nunca dio resultado", añadió el dirigente.