En las puertas del segundo cisma del fútbol uruguayo

El tema estuvo sobre la mesa en Asunción, en la sede de la Conmebol, donde hubo conversaciones extraoficiales en los encuentros que mantuvieron hace un mes los representantes de la AUF y de la Confederación, en los que estuvo el presidente Alejandro Domínguez. 

Por tanto, de no llegar a un acuerdo en el nuevo marco regulatorio de la AUF, y de concretarse ese paso de generar una nueva estructura de la Asociación forzado por una posible suspensión de afiliación de FIFA, se estará escribiendo la solución al segundo cisma en el fútbol uruguayo.

En 1922, en el primer cisma, el ente rector del fútbol dividió a Nacional y Peñarol de un lado y del otro. Casi un siglo después, los dos grandes aparecen del mismo lado, y una decena de clubes chicos, entre los que se cuenta a Danubio y Defensor Sporting, del otro.

“Si el viernes no hay avance, me voy para casa. No tenemos mucho más margen. Hay que redactar el estatuto para lunes o martes y enviarlo a FIFA, para luego citar a asamblea”, Andrés Scotti

La última implosión del miércoles de noche en la AUF, luego que la mesa negociadora no llegó a un acuerdo sobre la integración del nuevo Congreso, la existencia o no de una liga profesional y las normas sobre corrupción, transparencia, contratación y conflicto de interés, expuso a la Asociación a un grave perjuicio internacional y local.

El camino está minado y si FIFA activa su plan de sancionar a la AUF, Nacional y Peñarol no podrán participar en la Copa Libertadores y perderán ingresos por US$ 4,2 millones por su participación en la primera fase en 2019.

La última detonación

El miércoles se reunieron las tres partes que componen la mesa de negociación y el presidente del comité de regularización de la AUF Pedro Bordaberry, luego de leer un mensaje del capitán de la selección Diego Godín, puso sobre la mesa el tema urticante: la integración del Congreso.

Los jugadores de la selección le pidieron al presidente de la comisión “una composición democrática, plural e inclusiva de la nueva AUF, y que todo se desarrolle en igualdad de condiciones”. El texto, dirigido a Bordaberry en forma personal, no fue repartido a los representantes que participaron en la reunión sin que fue leído por el presidente. “Era una carta personal”, explicó a Referí. En su momento, la comisión les hizo llegar a todos los integrantes de la mesa de negociación la posición de la Secretaría Nacional del Deporte.

Puesto a debate el tema de la conformación del Congreso se encontraron con la detonación de que los clubes, que hasta ahora tienen el 94% del poder de la AUF, quieren que los votos de la nueva asamblea de la AUF se repartan en un 71,8% para el fútbol profesional, 25,2% para el fútbol amateur y 3% para los grupos de interés.

Los grupos de interés plantearon una participación igualitaria, 33% para cada una de las tres partes.

FIFA sugiere que la influencia del fútbol profesional en el Congreso no sea mayor a 60%.

El tema no fue abordado este jueves cuando se volvieron a reunir en la AUF, porque Bordaberry trata de descomprimir la situación. El tema lo analizarán este viernes o el lunes, como última opción.

La intención del comité de regularización es acordar el estatuto, en la AUF, como máximo el martes próximo, en cinco días, para elevar el documento a la FIFA y a la Secretaría Nacional del Deporte para que avalen lo actuado y para no llegar a una asamblea, aprobar el nuevo marco regulatorio y que luego no logre el apoyo del ente rector del fútbol mundial ni del gobierno uruguayo.

La advertencia de Scotti

Leonardo Carreño

A raíz de esta situación, Andrés Scotti dijo que “todos los clubes tiran para su lado”, y expresó que “tienen que ceder su poder al interior, al fútbol femenino, al fútbol amateur y a grupos de interés si queremos un mejor fútbol uruguayo, y para que la participación sea real”.

En declaraciones al programa Placard de AM 1010, el exfutbolista afirmó: “Si el viernes no hay avance, me voy para casa. No tenemos mucho más margen. Hay que redactar el estatuto para lunes o martes y enviarlo a FIFA, para luego citar a asamblea”. 

Silencio a la transparencia

El otro aspecto que inquietó a Bordaberry fue el silencio de las instituciones a las normas sobre corrupción, transparencia, contratación y conflicto de interés, que el lunes fue presentado para analizar y aprobar. El texto destaca la creación de una estructura que blinde a la AUF en los temas que aborda este punto. Entre los aspectos más destacados, se resuelve formar una comisión integrada por las tres partes del nuevo congreso: fútbol profesional, fútbol amateur y grupos de interés. Además, se establece que como plazos máximos para negociar contratos de televisión, streaming, publicidad, entre otros, el período de gestión del Consejo Ejecutivo, que es de cuatro años.

Este asunto fue un aspecto en el que los futbolistas de la selección insistieron desde el gobierno de Wilmar Valdez y que ahora aparece en la mesa de negociación como parte del nuevo estatuto de FIFA.

Las posibles sanciones de FIFA

El 15 de noviembre es el plazo máximo que tiene la AUF para convocar a la asamblea para el 30 y aprobar el nuevo estatuto antes del 2 de diciembre. ¿Qué sucede si no lo hace? FIFA advirtió que tomará medidas contra la Asociación. La suspensión de afiliación es una de ellas. ¿Qué significa? Dependerá del grado de sanción, si es solo para la competencia local o para la internacional. En el caso de la primera, quedarán libres los futbolistas y la AUF ya no tendrá su lugar en FIFA. Si la sanción solo apunta a la competencia internacional, los clubes clasificados a la Libertadores y Sudamericana no podrán participar en el sorteo de diciembre y si avanza en el tiempo, la selección no podrá participar en ninguna competencia internacional: Sudamericano sub 20 de enero, China Cup de marzo, Copa América, Eliminatorias y lo que siga para adelante.