Agro > ¿CUÁNTO HAY QUE PAGAR?
En un año con fríos "adelantados", creció la venta de leña y también el precio
Desde que llegaron los días con fríos intensos, incluso desde poco antes de iniciado este invierno, aumentó la demanda por leña para utilizar como fuente de calor, básicamente en estufas. Eso, combinado con cambios en el valor del combustible que inciden en el costo del flete para traer esa madera a Montevideo, incidió para que la leña se comercialice a casi $ 2.000 más por tonelada con relación al valor que tenía a esta altura del año pasado, según un relevamiento realizado por El Observador.
Los 1.000 kilos de astilla y rolo de eucalipto rojo cuestan entre $ 7.900 y $ 8.500 en barracas de leña de Montevideo, mientras que en 2021 el precio estaba entre $ 6.200 y $ 6.700.
Esas dos son las maderas más elegidas para utilizar en las estufas a leña, el recurso para calefaccionar espacios interiores en Uruguay más utilizado después de la energía eléctrica, con base eso en un estudio del Ministerio de Ambiente.
Se estima que 1.000 kilos de leña pueden durar un mes si la estufa se mantiene prendida desde la mañana hasta la noche; por día se utilizan cerca de 50 kilos si la estufa se utiliza de esa manera, explicaron operadores del sector a El Observador.
Las piñas, que se compran para iniciar el fuego, sí mantuvieron su precio con respecto al año pasado: una bolsa se cobra de $ 150 a $ 250.
Dependiendo de sus capacidades de almacenamiento, hay clientes que eligen comprar de a pocos kilos, por ejemplo cargas de 200 kilos, mientras otros prefieren comprar en mayor cantidad para asegurarse leña para el invierno.
Por otro lado, la leña de monte también subió de precio. Mientras el año pasado se vendía a unos $ 7.000 los 1.000 kilos, este año cuesta entre $ 8.000 y hasta $ 10.000 en algunos lugares. Esta leña, se precisó, es la más elegida para prender la parrilla y elaborar comidas, no para uso en las estufas.
Por qué subió el precio
Generalmente el precio de la leña tiene un aumento anual y luego se mantiene, explicaron a El Observador desde la barraca Las Hermanas. Con eso como marco, en general los comerciantes ven un precio estable para las próximas semanas, aunque no se descarta alguna suba puntual.
Integrantes de otra barraca, Los Bosques, explicaron por su parte que este año "se ha vendido más leña" y que "se ha vendido más parejo". La demanda fue temprana y una vez que comenzó el frío la compra de leña “no ha parado”, dijeron.
El principal factor de suba de precio de la leña fue el aumento en los costos de los fletes, principalmente por la suba en el precio del combustible. Sucede que la leña que se comercializa en Montevideo llega desde Melo, Fraile Muerto, Artigas, Treinta y Tres, Tacuarembó y Rocha, desde cientos de kilómetros.
Con la alta demanda se ha dado también una baja en la oferta, más que nada de astillas, incluso algunos comerciantes comentaron que hay casos de barracas de leña que han detenido su actividad por poco stock.
Un consejo
Oficialmente el invierno comenzó el 21 de junio, pero en este 2022 el frío comenzó antes de esa fecha, es más, previo a ese día se registraron dos episodios de ola polar en todo el país.
El Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) estimó que durante este invierno las temperaturas se mantendrán en el rango habitual, e incluso algo por debajo del promedio normal.
El meteorólogo Núbel Cisneros, consultado por El Observador, comentó que este será un invierno “largo y muy frío”, con un “alto promedio de heladas”.
El también meteorólogo Mario Bidegain sostuvo, en cambio, que durante esta estación las temperaturas se mantendrán en un nivel promedio “normal” con respecto a otros años.
Ambos meteorólogos coincidieron en que este será un invierno que se desarrollará seco, con lluvias irregulares y escasas. Habrá “lluvias por debajo de lo normal”, indicó Bidegain.
En línea con esta realidad, para que la leña sea más eficiente es importante mantenerla seca, dado que si tiene altos niveles de agua la combustión no se realiza de la manera correcta, y por ende se produce más humo y menos calor.
Un informe del Ministerio de Ambiente consignó que después de la electricidad, la leña es la segunda fuente de energía más utilizada en los hogares uruguayos.
También indicó que en 2021 el 54% de las casas uruguayas contaban con estufas a leña, quematutis o calderas de leña.
