Escasos acuerdos y negociaciones trancadas pautan marcha de los Consejos de Salarios

A dos meses de iniciadas la séptima y mayor ronda de negociación colectiva desde que hay registros son escasos los sectores de actividad que lograron renovar acuerdos. Además, son pocos los casos en que se ha podido determinar cómo se autoclasifica el sector (en problemas, intermedio o dinámico), un punto clave porque de eso depende el monto de los aumentos nominales que recibirá cada rama durante los próximos dos o tres años. 

Ello en un contexto marcado por el deterioro del empleo, la reaceleración de la inflación  y la crisis argentina cuyos efectos sobre la actividad económica se sentirán con más fuerza en este segundo semestre y el arranque de 2019, según coinciden la mayor parte de los analistas. Nada de eso ayuda a un buen clima para la negociación.

Los supermercados son uno de los sectores del comercio masivos en mano de obra que muestra grandes dificultades para avanzar en la actual ronda de negociación salarial.

Los trabajadores reclaman un salario mínimo de $ 25 mil mensuales ( hoy es de unos $ 20 mil promedio) retroactivo al 1° de julio. El sindicato argumenta que el sector está creciendo por lo que existe margen para la mejora solicitada. Otras reivindicaciones plantean jornada laboral a 40 horas semanales sin pérdida salarial, y el pago de 50 boletos, entre otros puntos.

La Cámara de Comercio que representa al sector empresarial se muestra contraria a los pedidos del sindicato. Se proponen ajustes anuales por la mitad de la inflación anual y un correctivo al final del convenio, es decir dentro de dos años. Además, se plantea eliminar el pasaje automático  de categorías y no actualizar las partidas por presentismo y antigüedad.

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El sindicato de Fuecys realizó el miércoles un piquete en las puertas del supermercado Disco de Punta Carretas ubicado Víctor Soliño y García Cortina. La medida impidió que los clientes pudieran ingresar a realizar compras en el comercio. El corte que había comenzado en la mañana fue levantado poco después del mediodía a pedido de la Justicia.

Camilo Dos Santos

Rurales

Otro sector qué está complicado es el rural (ganadería, arroceros y lechería). Las principales gremiales le comunicaron esta semana al gobierno que no están dadas las condiciones para volver a los Consejos de Salarios. A mediados del mes pasado, la Asociación Rural, la Federación Rural y la Asociación de Cultivadores de Arroz, entre otras, decidieron retirarse de la negociación salarial. Una de los motivos principales fue el desacuerdo con el pago de un correctivo por inflación establecido en el convenio anterior. Si bien durante la última Expo Prado el ministro de Economía Danilo Astori se mostró optimista en que las gremiales volvieran a negociar, las cinco principales gremiales enviaron este martes un mail al Ministerio de Trabajo ratificando que no tienen previsto volver a la mesa tripartita, según consignó El País. 

Metalúrgicos

En otras áreas de la industria como el metalúrgico la situación no es muy distinta. Una multitudinaria asamblea de la Untmra realizada el jueves pasado resolvió comenzar a trabajar menos horas desde el próximo 1° de octubre. Se plantea que las 44 horas semanales sin pérdida de salario sea un piso que se uniformice a nivel de todas las ramas de actividad. En lo estrictamente salarial los metalúrgicos volverán a repetir el planteo que realizaron en la negociación pasada. La fórmula que manejan es inflación más aumento salarial real de tres puntos.

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Pocos acuerdos

Hasta ahora hubo acuerdos en construcción, industria de bebidas, lácteos, sector bancario de fideicomisos y tarjetas de crédito, zonas francas, transporte aéreo nacional e internacional,  industria molinera,  elaboración de pan, granjas y apicultura.

La gran mayoría de las negociaciones, unos 180 ámbitos, se desarrollan en este segundo trimestre. La demora para renovar los convenios perjudica a los trabajadores, pero también a las empresas  que deberán pagar retroactividad al 1° de julio, muy cerca de  fin de año y junto con licencias y aguinaldos.

La semana pasada el director nacional de Trabajo, Jorge Mesa dijo a Búsqueda que será difícil que los grupos puedan cumplir con el plazo de 90 días que se dio a cada mesa para cerrar los acuerdos, según la pauta oficial.

En el MEF quieren que se termine lo antes posible la ronda de negociación salarial que viene más lenta de lo deseado.

Ese es uno de los principales motivos por los que se buscan frenar los efectos de la crisis argentina sobre el mercado cambiario local, según dijeron fuentes oficiales a El Observador.

Una inflación alejada del rango meta de entre 3% y 7% (hoy está en 8,3%) complicaría la firma de acuerdos apegados al esquema de aumentos nominales y correctivos que se propone. Una muestra es lo ocurrido en la construcción. El Sunca impulsó un acuerdo con triple blindaje por inflación, separado del criterio de correctivos que promueve el Poder Ejecutivo.