El departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció la constitución de una "fuerza de choque" contra el tráfico ilegal de fentanilo, semanas después que China prometiera cooperar en la lucha contra este opiáceo sintético en el marco del encuentro que mantuvieron los presidentes Joe Biden y Xi Jinping en las afueras de la ciudad de San Francisco.
Según el gobierno estadounidense, los narcotraficantes, sobre todo el cartel mexicano de Sinaloa, fabrican el fentanilo con sustancias químicas procedentes de China y después lo introducen de contrabando en el país a través de la frontera con México.
El nuevo grupo de acción "utilizará todas las herramientas a su disposición para desbaratar la capacidad de los narcotraficantes de vender este veneno en nuestro país", afirmó la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, en un comunicado.
El grupo estará presidido por el subsecretario del Tesoro para terrorismo e inteligencia financiera, Brian Nelson, y el jefe de investigación criminal, James Lee.
El objetivo es identificar mejor el lavado de dinero, especialmente el realizado con criptomonedas, detectar la violación de sanciones impuestas a narcotraficantes y facilitar la colaboración con otros países, informó el Tesoro en un comunicado.
En noviembre, el presidente chino Xi aceptó tomar "una serie de medidas" para reducir el suministro de sustancias químicas usadas para fabricar fentanilo durante la cumbre con su homólogo estadounidense Biden.
El Tesoro afirma que impulsará este acuerdo entre ambos mandatarios "para reanudar la cooperación bilateral en materia antinarcóticos, centrándose en reducir el flujo de precursores químicos".
En octubre, México, que insiste en que en su país no se produce fentanilo, también acordó colaborar con China en la lucha contra el opiáceo sintético, 50 veces más potente que la heroína.
Hasta el momento, el departamento del Tesoro estadounidense utilizó las sanciones, casi 250 desde diciembre de 2021, como una de sus principales herramientas en esta lucha.
Las consecuencias del fentanilo son devastadoras en Estados Unidos, donde es responsable de alrededor de dos tercios de las 110.000 muertes por sobredosis registradas entre marzo de 2022 y marzo de 2023, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
(Con información de AFP)