Estudiantes que inspiran su diseños en la arquitectura

Cariátides son las figuras femeninas esculpidas que sostienían las estructuras en la arquitectura griega. De allí tomaron las alumnas de 4to año de Diseño de Modas de ORT el nombre Átide para presentar cinco colecciones, justamente, inspiradas en la arquitectura.

Si bien fue una muestra estudiantil, su finalidad iba más allá del diseño. En el marco de la materia Diseño y Producción de Eventos, el objetivo fue que 16 estudiantes no sólo hicieran y mostraran su indumentaria inspirada en la arquitectura nacional, sino que también produjeran el evento siguiéndo estándares profesionales. Para eso se dividieron en equipos para conseguir espónsors que les permitieran la autofinanciación, para encargarse de las modelos y de la ambientación del espacio y de la difusión y el diseño gráfico.

La locación del subsuelo del Mercado Agrícola de Montevideo fue cedida como apoyo al evento, pero las estudiantes debieron encontrar la forma de cubrir todos los demás gastos de producción que en algunos de los equipos acendió a los 75 mil pesos.

Para tener una idea de los costos que involucra un evento de moda, este desfile contó con 19 modelos que cobraron entre $ 2.800 y $ 3.000 cada uno. Además, cada colección era precedida por un video hecho por profesionales mostrando parte del proceso creativo.

Mediante espónsores que agasajaban a los invitados antes y después del desfile, venta de bonos colaboración y, muchas veces, ahorros propios, las estudiantes fueron responsables de sustentar el 100% del evento.

"Creo que nos cambió la cabeza totalmente. Nos abrió toda una visual de las cosas que abarca esto, que si no organizaste un evento, no te das cuenta ", dijo Carmela Sotuyo, de 21 años, que junto a Belén Guerra y Martina Rial, hicieron una colección inspirada en el Aeropuerto del arquitecto Rafael Viñoly.

Se presentaron un total de treinta y tres conjuntos en la pasarela.

El director artístico de la muestra, el diseñador brasileño Lucius Vilar, destacó la importancia de todo el proceso, desde la idea y el dibujo, hasta la costura y la puesta en escena del desfile.

"Para mí moda es arquitectura porque estamos haciendo una construcción y hoy todo el proceso es muy importante", destacó el brasileño.

Vilar contó que pensó en la arquitectura local como disparador porque disfruta mucho de mirar los edificios antiguos y modernos cuando visita Uruguay.

"Los detalles art decó y art nouveau son increíbles. Saco fotos y más fotos porque la ciudad es linda por la combinación de lo viejo y de lo nuevo", manifestó el diseñador que asesoró a las estudiantes.

Las obras del ingeniero Eladio Dieste, el Aeropuerto Internacional de Carrasco, la convivencia entre la arquitectura antigua y la contemporánea en Montevideo, las puertas de la Ciudad Vieja y el arquitecto Julio Vilamajó fueron los campos de investigación y desarrollo seleccionados por las estudiantes que tienen entre 21 y 27 años. Florencia Perdomo, de 26 años, fue una de las tres integrantes del equipo Detí, integrado también por Sofía Grassi y Sofía Zerbino, que basó su colección en Eladio Dieste.

Perdomo contó que sus diseños buscaron repetir los módulos como Dieste hacía con los ladrillos. "Y que los volúmenes de las prendas, además de ser amplios como la arquitectura de Dieste, mostraran las curvas de sus edificios", explicó. La alta competencia de un mercado que exige creatividad y cualidades en comunicación y negocios para que un diseñador se desatque, hacen que las estudiantes dejen todo en estas muestras. "El diseño de autor es difícil. Es más fácil entrar en el mercado laboral de la producción y no tanto del diseño. Pero bueno, es parte del todo", concluyó Perdomo.