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Federer, del llanto por su 10º Basilea a servir pizza a los ball-boys
El suizo Roger Federer conquistó por décima vez en su carrera el torneo de Basilea, en su localidad natal, al superar al joven australiano Alex De Miñaur (número 28 del mundo) por un doble 6-2.
A los 38 años, Federer suma ya 103 títulos y esta temporada ya levantó las copas de Dubái, Miami y Halle. Ahora está tan solo a seis títulos del récord que ostenta el estadounidense Jimmy Connors (109).
El suizo, con 20 títulos de Grand Slam en su palmarés, lleva una racha de 24 victorias consecutivas en su ciudad. Lleva cinco años sin perder en esa cancha, cuando el argentino Juan Martín Del Potro lo derrotó en la final en 2013.
“Nunca hubiera pensado ganar diez títulos en Basilea, es extraordinario”, declaró Federer, antes de emocionarse y derramar algunas lágrimas.
Como es tradición, Federer le sirvió pizza a los ball-boys (alcanzapelotas) al final del certamen.
Basilea es el segundo torneo donde Federer alcanzó la barrera de los 10 títulos, después de Halle, sobre césped.
El helvético no dio ninguna opción a De Miñaur el domingo, le rompió dos veces el servicio en cada set y no le permitió ninguna opción de rotura.
“Esperaba que Roger se hubiera hartado de ganar aquí y que dejaría una opción a otro”, bromeó el australiano, superado en poco más de una hora de juego.
A lo largo del torneo Federer solo dejó escapar 18 juegos en cuatro partidos esta semana, beneficiándose de la retirada por lesión de su compatriota Stan Wawrinka en cuartos de final. Wawrinka le ganó en primera ronda al uruguayo Pablo Cuevas.
¿Rumbo a París?
Ahora pone rumbo teóricamente al Masters 1000 de París-Bercy, que comienza el lunes, donde el sorteo le deparó una potencial semifinal contra el español Rafael Nadal.
Pero la presencia de Federer en la capital francesa no es segura y podría decidir descansar pensando en el Masters de final de temporada, que se disputa en Londres del 10 al 17 de noviembre.
“Tengo una reunión con mi equipo programada el lunes para hablar no solamente de París, sino también de la próxima temporada. Imagino que de aquí a mañana (lunes) sabré si voy a París o no”, declaró Federer en su conferencia de prensa tras el título en Basilea.
“Me siento bien físicamente. Estoy contento con cómo me siento, pero simplemente no sé si tengo que hacerlo (jugar la próxima semana). Voy a decidirlo con mi equipo”, apuntó.
El pasado año, Federer dejó planear la duda hasta el último minuto sobre su presencia en París-Bercy. Finalmente optó por jugar en la cita en pista cubierta de la capital francesa, por primera vez desde 2015, llegando hasta las semifinales.
En varias ocasiones en el pasado, Federer optó por bajarse de la lista de inscritos en París-Bercy para guardar fuerzas de cara el ATP World Tour Finals.
