El Ministerio de Industria consideró que la empresa de telefonía
Claro no tiene licencia para brindar servicios de televisión satelital, aunque una sentencia del Tribunal de Apelaciones en lo Civil de Tercer Turno falló a favor de la compañía y le dio la autorización para operar, informó El País.
Claro "no puede culminar los trámites de importación porque la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec) no extendió la autorización. Esta conducta , que no responde a ningún acto legítimo, obstaculiza", señaló la sentencia a la que accedió El Observador.
Si bien el gobierno tuvo que acatar el fallo de la Justicia que el miércoles 6 habilitó a la firma a importar 500 decodificadores y receptores satelitales para poder ofrecer ese servicio de televisión, luego amenazó con incautarlos y retirarle las licencias a la empresa para trabajar con telefonía celular y datos móviles. Ese es el principal mercado de la firma.
La medida del gobierno de incautar los equipos de Claro busca "la protección" de los derechos de las otras compañías que trabajan en el mercado de telefonía satelital. Una resolución del martes 12 firmada por la ministra Carolina Cosse sostiene que "la prestación de los servicios de televisión satelital directa al hogar le están vedados" a Claro y agrega que si la empresa incumple la normativa, "dará lugar a consecuencias".
La resolución sostiene que la denominada ley de Medios establece que la autorización de la compañía para brindar servicios de televisión satelital caducó a los 12 meses de vigencia, que se cumplieron en enero de 2016. Por lo tanto, aunque importara los decodificadores, Claro no tiene autorización para operar.
La compañía prestó durante un tiempo servicios de televisión satelital a 200 clientes, porque necesitaba importar los aparatos para ampliar el mercado. Actualmente, la única empresa habilitada a ofrecer esa prestación es
DirecTV.
El Observador trató de comunicarse sin éxito con la empresa Claro.