A los pocos meses de asumir, el directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) radicó una denuncia penal contra la gestión de Álvaro Villar en el Hospital Maciel por una presunta conjunción de interés público y privado.
La decisión estuvo fundada en las conclusiones preliminares de una auditoría que encontró diversas irregularidades y provocó –también– la instrucción de una investigación administrativa sobre Villar y los integrantes de su equipo de gestión.
Casi tres años después de estos hechos, mientras la causa no registra avances en Fiscalía, la investigación interna de ASSE concluyó con la sugerencia de un sumario a Villar, Edgar Cura, Pablo Vera, Gastón Carámbula, Líber Martínez y Emiliano Martínez, quienes fueron individualizados prima facie como “responsables de falta administrativa”, según consta en una resolución a la que accedió El Observador.
El documento está firmado por las dos máximas jerarquías de la dirección Jurídica Notarial de ASSE, el abogado Gustavo Capponi Massini y la escribana Patricia Caresini, y fue elevado al directorio el 24 de marzo aunque el asunto aún no fue tratado pese a que forma parte del orden del día desde hace varias sesiones.
Villar dejó la dirección del Maciel en abril de 2020 pero mantuvo su cargo presupuestado en ASSE como cirujano de ese hospital hasta el 19 de mayo de este año, cuando renunció argumentando que las tareas al frente del Hospital de Clínicas (que depende de la Facultad de Medicina) le insumían demasiado tiempo y que no quería prorrogar su licencia sin goce de sueldo pese a que podía hacerlo.
Leonardo Carreño
Investigación administrativa sugirió sumario a Villar
Debido a que la renuncia ocurrió antes que el directorio tratase el tema, en ASSE hay dudas de si es posible imputarle la falta administrativa –el sumario en este caso–, debido a que ya no pertenece a la institución.
La investigación y las irregularidades
La investigación se centró en las obras de la Comisión Pro Remodelación y Ampliación del Hospital Maciel (2015-2019) y tomó como insumo también el resultado final de la auditoría interna cuyas “conclusiones son coincidentes con las emitidas por la instrucción actuante”.
A modo de resumen, señala que hubo: ausencia de controles en todas las etapas de procedimientos de compra y gasto; ausencia de oposición de intereses, falta de transparencia que impide asegurar el buen uso y manejo eficiente de los fondos públicos por falta de procedimientos de compra competitivos; omisión de solicitud de presupuestos; debilidad en la información sobre costos totales de obra; obras sin el control de la división Arquitectura de ASSE; exceso de costos respecto a lo planificado; irregularidades en los pagos y facturación de fondos recibidos de la Comisión de Apoyo Local del Hospital; fondos de Lotería no rendidos e irregularidades en la contratación de profesionales.
La investigación agrega que el equipo de gestión intervino y tomó decisiones en la “administración y gasto de los fondos públicos” destinados a obras en el hospital de forma “ilegítima” violentando diversos artículos del decreto que regula la conducta en la función pública.
En este sentido, dice que los gestores actuaron con “conocimiento cabal de su proceder” dados los “años de experiencia y la experticia en la administración y manejo de fondos públicos” que tenían en virtud de las “tareas inherentes a sus cargos en ASSE”, manejando los fondos con destino a obras “de forma negligente, utilizando como medio y excusa la figura jurídica de la Comisión Pro Remodelación y Ampliación del Hospital Maciel, la que según éstos se regulaba por el derecho privado, y los habilitaba a actuar al margen de la ley sin los controles debidos”.
A modo de ejemplo, el documento pone el acento en la irregularidad de la contratación –por parte de Villar y Cura– de los hermanos Martínez como arquitectos privados “con remuneración aparte” cuando eran funcionarios públicos para hacer “tareas técnicas propias” (direcciones de obra) que “estarían comprendidas en las inherentes a sus cargos presupuestales”.
Camilo dos Santos
La investigación es sobre las obras del Hospital MAciel
“Éstas irregularidades en la contratación y pago de honorarios profesionales, son destacadas en el informe de auditoría, donde se establecen como hallazgos la falta de oposición de intereses y la existencia de indicios que podrían configurar conjunción de interés público y privado en violación del articulo 46 del TOCAF”, dice.
También señala la responsabilidad de Villar porque como ordenador de gastos dispuso que Cura –que era su adjunto– “gestionara la organización y ejecución de todas las obras” pero también porque “personalmente ordenó transferencias de fondos públicos" a la comisión con el “conocimiento y aval” de Garbarino, que era el gerente administrativo.
A su vez, menciona que Cura organizó “todo el funcionamiento y operativa” para que se “utilizaran fondos públicos en detrimento de la comisión legal y formalmente constituida para tales fines”. También dice que “resultó omiso” en tramitar un expediente donde se solicitaba la homologación de la designación de los integrantes de la comisión, la que “permaneció en su despacho desde el 27 de noviembre de 2015”.
Leonardo Carreño
ASSE realizó una denuncia penal por la gestión de Villar
Cuestiona que Vera –como administrador del Maciel– también participó en la comisión en forma activa, “omitiendo los controles en los procedimientos de compras menores” algo que debía hacer por el cargo, y que actuó irregularmente desde mayo de 2015 porque la comisión nunca fue homologada por el directorio de ASSE.
“Tenía conocimiento de la paralización del expediente sin realizar ninguna acción con el fin de continuar el trámite, teniendo en cuenta su doble rol de administrador e integrante de la comisión”, dice la investigación, que también menciona que brindó al equipo de auditoría interna y de gestión “información falsa” porque “manifestó y suscribió el desconocimiento de la persona responsable en llevar el registro contable de la Comisión Pro Remodelación y Ampliación del Hospital Maciel”.
Respecto a Carámbula, la investigación dice que era “integrante de hecho” de la comisión porque tenía “efectiva y activa participación”. También que firmó “rendiciones de cuenta con alcance de revisión limitada transgrediendo los principios básicos de la oposición de intereses que deben primar en la función pública, agravado por ostentar el cargo de gerente en la Comisión de Apoyo de los Programas Asistenciales Especiales de ASSE”.
El Observador consultó a Villar quien prefirió no realizar comentarios.