El juez Fernando Islas aceptó el pedido de la fiscal Mónica Ferrero de prorrogar por 180 días la prisión preventiva a Martin Mutio, el empresario condenado a 15 años de prisión por haber traficado 4,5 toneladas de cocaína a Europa. En una tensa audiencia que se realizó este jueves, ante el vencimiento del plazo de la prisión impuesta por la Justicia, se hizo lugar al pedido de la Fiscalía.
Luego de que un tribunal de apelaciones revisó la absolución y lo devolvió a la cárcel, la defensa recurrió a la Suprema Corte de Justicia en casación. Actualmente el expediente está en Fiscalía de Corte para que dé su opinión sobre el fallo del tribunal que lo condenó.
La defensa de Mutio, encabezada por el abogado Florencio Macedo, pidió que se le permitiera cumplir prisión domiciliaria en la casa del padre con tobillera electrónica o pagar una fianza.
Según supo El Observador en la audiencia se vivieron momentos ríspidos ya que Mutio pidió para hablar e insistió en que es inocente y que la fiscalía miente.
Anteriormente se había expresado por medio de una carta pública y dijo que está "cumpliendo una condena injusta". "No soy un narcotraficante. Nunca lo he sido, pese a que muchos lo dicen y otros tantos los repiten" y "estoy muerto en vida".
"Hoy espero, en reclusión y en un aislamiento prolongado que está terminando con mis fuerzas, que los cinco ministros de la Suprema Corte de Justicia acepten el recurso de casación presentado por mis abogados. Es mi última esperanza de que alguien vea mi caso, vea de que no hay pruebas que demuestren que soy un narcotraficante y me devuelva la libertad", sostuvo en la carta enviada al semanario Búsqueda.
También planteó un recurso de habeas corpus, que fue rechazado por la Justicia, en rechazo a su reclusión. El recurso de habeas corpus está previsto en el artículo 17 de la Constitución para casos de prisión indebida, a fin de que la autoridad aprehensora explique y justifique de inmediato el motivo legal de la aprehensión.
Mutio está siendo investigado desde 2019, cuando uno de los contenedores de su empresa, que exportaba soja, fue incautado en Hamburgo con 4,5 kilogramos de cocaína en su interior. La jueza Adriana Chamsarian lo había absuelto en agosto del año pasado, pero ante la apelaicón de Ferrero un Tribunal de Apelaciones revocó la decisión de la jueza y lo condenó a 15 años de prisión.
Chamsariam está sumariada y trasladada a un juzgado penal, mientras que Islas la reemplaza en Crimen Organizado.
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