Pablo y Diego Forlán fueron dos de los más de 60 campeones que este viernes fueron homenajeados como campeones de la Copa América, a su vez que también se homenajearon a quienes ganaron el título del Mundialito con la Copa de Oro de 1980-81.
La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) junto con la Asociación de Historiadores e Investigadores del Fútbol Uruguayo (AHIFU), aprovecharon la fecha de este 9 de junio, Día del Fútbol Sudamericano decretado por la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), en homenaje a Uruguay, que se coronó como el primer campeón mundial y olímpico representando al continente, y en el que se cumplieron 99 años de aquel día, para realizar un tributo con los campeones de ambos torneos.
La AUF les otorgó a cada uno de ellos, un carné celeste exclusivo, que les permitirá ingresar a todos los partidos organizados por la Asociación, junto a un acompañante, en forma vitalicia y en cualquier cancha.
Dos de esos campeones son padre e hijo y estuvieron presentes.
Pablo Forlán ganó la Copa América disputada en Uruguay en 1967 (dirigido por su suegro, Juan Carlos Corazo, quien a su vez, ya la había ganado también en 1959), mientras su hijo Diego lo hizo en Argentina 2011.
Referí los reunió para hablar acerca de este reconocimiento y para tomarse una fotografía juntos y con la Copa América.
"Estar acá con Diego y que nos hayan hecho este reconocimiento a Diego y a mí, como al resto de los muchachos, es muy especial. También recuerdo a mi suegro, que la logró en dos ocasiones. No hay en el mundo una familia así, que haya ganado un trofeo de estas características en distintas ocasiones", dijo Pablo Forlán a Referí.
Mientras tanto, Diego acotó: "Estar aquí con papá, es muy especial y me emociona. A veces uno piensa en en las cosas del fútbol como si estas fueran fáciles y ser campeón de América es muy difícil".
Y añadió: "Es un privilegio, un lujo enorme. Escuché la historia mil veces de lo que ocurrió con mi familia, es decir, el hecho de que la ganara mi abuelo y mi padre, además de mí, pero me sigue emocionando".
"Es muy emotivo ver a todos estos exjugadores poder ser reconocidos. Es una gran alegría", dijo Diego Forlán.
En tanto, Pablo sostuvo que "este ha sido un gran reconocimiento a todos los campeones, algo que se merecían".
En un rincón, luego de recibir su carné y tomarse la foto con sus excompañeros campeones de la Copa América 1995 disputada en Uruguay, se encontraba Sergio "Manteca" Martínez.
Su situación es similar a la de Pablo y Diego Forlán, ya que su papá, Carlos Martínez, quien jugaba como defensa, jugó dos encuentros y fue campeón de la Copa América de 1967, también disputada en suelo uruguayo.
"Me hubiera gustado que estuviera acá conmigo, pero falleció hace ocho años. Fue muy lindo cuando lo nombraron", dijo Manteca Martínez a Referí.
A su vez, agregó: "A veces se hacen comparaciones en el tiempo, pero hay generaciones de gurises que no tienen idea de quiénes fueron campeones. Eso no debería pasar".
Respecto al carné que recibió, dijo a Referí: "Estoy muy contento con este reconocimiento, al igual que mis excompañeros".
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá