La historia de cómo el Ejército capacita a un refugiado sirio

En forma algo temerosa, el hombre se acercó a quienes estaban brindando el curso y con dificultades para hacerse entender por el idioma explicó que ese día debía irse antes del mediodía, debido a que tenía que ir a la mezquita.

Los profesores accedieron al pedido y, tras agradecer el gesto, Nasr Alkasem se sacó el chaleco fluorescentes, guardó su casco y abandonó el Parque Roosevelt para ir a rezarle a Alá.

Alkasem es uno de los sirios que llegó a Uruguay luego que el gobierno de José Mujica abriera sus puertas para que los refugiados que buscaban escapar de la cruda guerra civil.

En una de sus facetas menos conocidas, el Ejército Nacional brinda cursos de capacitación a militares y civiles en diferentes rubros. Uno de ellos es el manejo de maquinaria pesada y en ese tema participa el sirio. Hace un mes, los responsables del programa recibieron una llamada solicitando un cupo para este ciudadano que estaba interesado en aprender a manejar una moto niveladora. "No hay ningún inconveniente", dijo el encargado y, pocos días después, Nasr estaba conociendo a sus compañeros de estudios.

De lunes a viernes, el hombre concurre a la brigada de ingenieros, ubicada en Camino Carrasco, a aprender el oficio. No habla casi nada de español, pero entiende lo que le indican sus profesores, informó a El Observador un docente que tiene contacto diario con él.

En algunas oportunidades han surgido dificultades para transmitirle algunas cuestiones técnicas, pero en esos casos la tecnología asomó como un poderoso aliado. Uno de los docentes de mecánica utilizó los traductores disponibles en internet para apoyarse. Las clases son de lunes a viernes hasta las 4, pero Alkasem ya advirtió que a veces los viernes debe irse un rato antes. Y, como parte de la tolerancia religiosa necesaria, los profesores aceptaron esa condición para ayudar a que ese hombre que nació en el otro extremo del mundo tenga algunas herramientas para defenderse a la hora de comenzar una nueva vida en Uruguay.

Él llegó a los cursos gracias al convenio que el Ejército tiene firmado con el Fondo de Capacitación (FOCAP) del área de la construcción.

"Le enseñamos maquinaria pesada tanto al personal subalterno como a civiles. Quien tiene el conocimiento técnicos es el Ejército para el uso de maquinaria pesada y buscamos transmitirlo", informó una fuente del Ejército.

A impulso del comandante en jefe del Ejército, Guido Manini Ríos, el Ejército saldrá a ofrecer sus cursos de capacitación a los jóvenes de los barrios periféricos donde están ubicados sus cuarteles.

Esa repartición invitará a los hijos de los soldados, pero también al resto de los jóvenes a recibir herramientas para luego poder salir a trabajar. Esa iniciativa tiene su respaldo en la experiencia que el Ejército tiene en su desconocido rol de transmisor de conocimientos técnicos.

Algunas son típicas de la labor militar, como protección contra armas químicas , buzos o guía de perros en la búsqueda de detección de explosivos. Pero otras, son de tareas cotidianas, como gomería, sanitaria y albañilería. Gracias a estos cursos, el Ejército no tiene la necesidad de salir a contratar electricistas, sanitarios o conductores para satisfacer sus necesidades en los cuarteles de todo el país. Un informante dijo que esa es una ventaja dado que, con los salarios que ofrecen las Fuerzas Armadas, sería difícil acceder a buenos técnicos para afrontar esas tareas.

Luego que El Observador informó el lunes 28 que el Ejército está en elaboración de un programa para enseñar oficios a los jóvenes de los barrios pobres, los teléfonos de los cuarteles han sonado con consultas y ofrecimientos, según confiaron fuentes del organismo,

Un zapatero jubilado de la UTU, por ejemplo, se ofreció para enseñar sus conocimientos. Lo mismo hicieron varios militares retirados que ocupan sus horas enseñando en diferentes puntos del país. Incluso a través de la cuenta de Facebook del Ejército llegaron comentarios con ofertas a futuro. En momentos en que las Fuerzas Armadas han estado bajo la lupa y ha surgido una gran polémica entorno a la reforma de la caja militar, una fuente del Ejército dijo que, aunque no se ve, parte del presupuesto militar va dirigido a capacitaciones de uruguayos y hasta de un sirio.