La Justicia india prohibió un documental que investiga crímenes de odio contra musulmanes

La resolución, adoptada por el Tribunal Superior de Allahabad, en el estado norteño de Uttar Pradesh, argumenta que la transmisión del documental ¿Quién encendió la mecha?, producido por la red árabe con sede en Doha, podría tener “consecuencias nefastas”.

“Considerando las malas consecuencias que probablemente ocurrirán con película opinamos que la transmisión se aplace hasta que se considere el fondo de la petición presentada”, dijo el tribunal luego de escuchar la solicitud contra la emisión.

El peticionario, de nombre Sudhir Kumar, alegó que el documental tiene el potencial de generar enfrentamientos entre la mayoría hindú y la minoría musulmana, y en consecuencia amenazar la integridad del país, que pese a ser un estado secular fue escenario de recurrentes episodios de violencia religiosa desde la independencia del Imperio Británico en 1947.

“El tribunal ordenó al gobierno indio que tome medidas para garantizar que la película no se transmita ni se promocione en las redes sociales a menos que las autoridades hayan examinado su contenido y se haya obtenido la autorización necesaria”, reseñó la cadena Al Jazeera mediante un despacho en el que consignó que el caso volverá discutirse el próximo mes.

¿Quién encendió la mecha? forma parte de la serie documental de Al Jazeera A quemarropa (Point Blank, por su título en inglés), investigaciones periodísticas respaldadas por testimonios y documentos y que en el caso del documental censurado releva las actividades de grupos supremacistas hindúes, como el Rashtriya Swayamsevak Sangh (RSS), el mentor ideológico de extrema derecha del gobernante Partido Bharatiya Janata (BJP).

El RSS, un grupo de milicias secretas con millones de miembros, se inspiró en los nazis. Formado en 1925, tiene como objetivo crear un estado étnico hindú a partir de una India constitucionalmente secular. El grupo fue prohibido brevemente en 1948 después de que uno de sus presuntos miembros asesinara a Mahatma Gandhi, el líder del movimiento de la independencia de la India.

“El documental presenta una entrevista con un desertor del RSS, quien revela detalles escalofriantes de sus sesiones de entrenamiento en campamentos del RSS, supuestamente supervisados por miembros del ejército indio”, señaló Al Jazeera luego de conocerse el falló provisorio del tribunal con sede en Allahabad. La película también describe el acoso y los ataques contra casi 700.000 musulmanes en el estado nororiental de Assam, gobernado por el BJP.

La investigación subraya que, desde la aprobación de una ley de ciudadanía en 2019, los musulmanes de habla bengalí en la región de Assam temen perder su nacionalidad y ser deportados a la vecina Bangladesh. La investigación, además, pone el descubierto “las campañas generalizadas en varios estados indios para demoler propiedades pertenecientes a musulmanes”, explicó Al Jazeera.

El documental denuncia que las campañas, que según la cadena son alentadas o al menos consentidas por las autoridades, incluyen el derribo de casas y negocios de musulmanes en un intento de privar económica y socialmente de sus derechos a la minoría musulmana.

La denuncia sobre la persecución de la que son objeto los musulmanes, que constituyen el 14% de la población, son sistemáticamente minimizadas por las autoridades de Nueva Delhi. Un portavoz del BJP desestimó las acusaciones hechas en el documental y sostuvo que el gobierno del primer ministro Narendra Modi está comprometido con el estado de derecho.

El gobierno, no obstante, suele defender al RSS, ilegalizado ya en tiempos del dominio británico y prohibido en tres ocasiones desde la independencia debido a su implicación en episodios de violencia política y terrorismo contras los colectivos sociales minoritarios a los que consideran un escollo en sus intenciones de instaurar una sociedad homogénea bajo las normas de una sola religión, la hinduista.

Los observadores señalan que el RSS recuperó espacios desde que el BJP, de fuerte tendencia nacionalista, retornó al poder, incluso en el Ministerio de Educación, desde donde impulsó la introducción de nuevos libros de texto en los que se reescribe parcialmente la historia de la India y se caracteriza a los musulmanes como violentos.

El gobierno afirma que el RSS, que cuenta con la simpatía de muchos empresarios por su posición contraria a la intervención del estado en la economía, es un grupo “no discriminatorio” que “trabaja por el bienestar de los indios de todos los orígenes, incluidos musulmanes, cristianos, pueblos tribales y grupos históricamente desfavorecidos como los dalit”.

La BBC, también censurada

La medida contra el documental de Al Jazeera sigue a una prohibición similar impuesta a una película de la cadena de noticias británica BBC, que cuestiona el papel de Modi cuando se desempeñaba como primer ministro del estado de Gujarat, donde más de 2.000 musulmanes murieron durante los disturbios registrados 2002.

Desde la prohibición de la película, las oficinas de la BCC en Nueva Delhi y Mumbai fueron allanadas y las autoridades indias acusaron a la red con sede en el Reino Unido de infracciones fiscales. La BBC, por su parte, negó los cargos y alegó que su investigación está respalda por diversas fuentes.

Por lo pronto, el gobierno utilizó poderes de emergencia para bloquear la transmisión del documental, titulado India: The Question Modi, al que calificó como una “pieza de propaganda”, ocasión en la que ordenó a Twitter que eliminara más de 50 tweets que enlazaban con el documental, y a YouTube que bloqueara cualquier carga del video. Las autoridades, incluso, interrumpieron la proyección del documental en una de las principales universidades de la India.

¿Qué pasó en Gujarat en 2002?

A fines de 2001, Modi fue nombrado primer ministro del estado indio de Gujarat para resolver las luchas internas en el BJP. En febrero de 2002, un tren con peregrinos hindúes que volvían a sus casas desde un templo de la ciudad de Ayodhya, en el estado de Uttar Pradesh, se incendió y murieron 59 personas.

Si bien el gobierno estatal dirigido por Modi alegó que los vendedores musulmanes en la estación de Godhra quemaron el tren, un informe de 2006 de un comité designado por el gobierno federal concluyó que el incendio fue accidental. Tan pronto como se difundió la noticia, turbas de hindúes comenzaron a arrasar los barrios musulmanes de Gujarat.

Más de 2.000 personas, la mayoría musulmanas, fueron asesinadas y decenas de mujeres violadas en lo que resultó ser una de las peores masacres religiosas en la historia del país, convirtiendo a Gujarat en uno de los estados con mayor polarización religiosa.

La carnicería le valió a Modi el epíteto de “hridaysamrat hindú”, “el gobernante de los corazones hindúes”, y catapultó su figura a la arena nacional y a los primeros planos del RSS y el BJP, al tiempo que continuó gobernando Gujarat hasta 2014, año en que se mudó a Nueva Delhi para asumir como decimoquinto primer ministro del país.

El documental de 59 minutos alega, en base a un informe clasificado del Ministerio de Relaciones Exteriores británico que cita fuentes no identificadas, que Modi ordenó a la Policía que hiciera la vista gorda ante la violencia que se prolongó durante días por “motivaciones políticas” y con el objetivo de “purgar a los musulmanes de las áreas hindúes”.

“La serie documental examina las tensiones entre la mayoría hindú y la minoría musulmana de la India y explora la política del primer ministro de la India, Narendra Modi, en relación con esas tensiones. Esta fue la fuente de informes e interés considerables tanto en India como en todo el mundo en los últimos años”, afirmó en su momento la BBC.

En 2012, un equipo de investigación especial designado por la Corte Suprema para investigar el rol de Modi y otros funcionarios sostuvo que no pudo encontrar evidencia para procesar al entonces jefe del gobierno estatal. Al año siguiente, Modi fue nombrado candidato del BJP a primer ministro. Ganó las elecciones generales de 2014 y regresó en 2019 con una mayoría en el parlamento.

“Nueva evidencia”

Según denunciaron en reiteradas ocasiones organizaciones internacionales y locales, desde 2014, el BJP de Modi y otros grupos de derecha afiliados al RSS intensificaron sus campañas supremacistas dirigidas, principalmente, contra la minoría musulmana.

“Las heridas sanan y las obligaciones de Derechos Humanos se cumplen cuando existe un verdadero compromiso con la justicia y la reforma. En cambio, los partidarios del BJP honraron a los hombres condenados por violación en grupo y asesinato en los disturbios de 2002”, afirmó Human Rights Watch cuando el gobierno censuró el documental de la BBC.

La nueva prohibición, en este caso dirigida contra ¿Quién encendió la mecha?, de Al Jazeera, según los grupos de Derechos Humanos es una “nueva evidencia” de la creciente influencia del RSS en el sistema de justicia y en los medios de comunicación en detrimento de las minorías religiosas. “Prohibiciones que contradicen flagrantemente el compromiso declarado del país con los ideales democráticos”, denunció el Comité para la Protección de los Periodistas, con sede en Washington.

(Con información de la BBC. Al Jazeera y AFP)