La lesión de Cavani, entre los rumores y el método uruguayo

Los tiempos no daban. En Inglaterra entraba la madrugada. En Uruguay había que resolver. Lo único que pidió fue silencio y respeto, algo que forma parte del manual de estilo de la selección.

Silencio porque no se podía filtrar en los pasillos del sanatorio que Suárez estaba ocupando una cama. Sabían que eso iba a disparar que hasta las enfermeras y los médicos se quisieran tomar una foto con la estrella celeste. Respeto porque, ante todo, primero está la persona y luego el deportista.

Alberto Pan operó a Suárez y al otro día comunicó todos los pasos dados a la sanidad de Liverpool.

¿Cómo se logra ese nivel de confianza para que un club que paga millones por un jugador permita que lo operen? "Con tiempo y respeto. Lo que te marca hacia el exterior es la permanencia, porque el vínculo de tantos años con los clubes te permite conocer a dos o tres sanidades diferentes, que van cambiando a medida que pasa el tiempo, pero siempre se van difundiendo las buenas experiencias", reveló Pan en el libro Maestro, el legado de Tabárez.

La recuperación relámpago de Suárez estuvo acompañada de la inmediatez de Pan para resolver, en un momento determinante, la capacidad de recuperación del jugador y el valor agregado de la sanidad de la selección.

El jefe de la sanidad de la celeste jamás imaginó encontrarse con otro caso que generara tanta repercusión mediática, con la otra estrella del equipo: Edinson Cavani. Su lesión en el Mundial generó todo tipo de comentarios.

La sanidad celeste emitió el lunes un comunicado aclarando que el jugador no estaba desgarrado. Horas después aparecieron supuestos audios de Josema Giménez asegurando que el jugador de PSG estaba desgarrado. Ni la veracidad de la autoría ni de la información se confirmaron, pero según allegados al plantel, consultados por Referí, influyó para que la AUF saliera a aclarar los tantos. También ayudaron a esa decisión los rumores, publicados en medios franceses, de presiones de París Saint Germain para que Cavani no jugara, y el morbo de que como el jugador reside en Francia no quería jugar.

Ante esto, la AUF volvió a salir al cruce e hizo público el resultado del estudio al que fue sometido el jugador. Asimismo, desde la delegación uruguaya en Rusia se reveló a Referí que "jamás hubo presiones de PSG".

Esa informaciópn es consistente con la forma en que se maneja la sanidad de Uruguay, que hace tiempo goza de la confianza de los clubes.

Una vez que un jugador se lesiona se envía inmediata comunicación al club y se detallan todos los pasos a seguir para la recuperación. Si el jugador se lesiona en un partido de las eliminatorias, al otro día Alberto Pan llama a su colega para informar del caso, y el futbolista viaja con un diagnóstico, los estudios para que los vea la sanidad del club y sugiere los pasos a seguir para la recuperación del jugador. Lo mismo ocurre a la inversa, cuando el futbolista viene a Montevideo.

Pasó con la lesión de rodilla de Luis Suárez en Barcelona, en 2017. El delantero había iniciado un proceso de rehabilitación en su equipo. El club perfectamente podía haber negado el viaje del delantero a jugar ante Argentina por eliminatorias. Sin embargo, lo mandó a Montevideo para que terminara la recuperación con la selección. Suárez llegó con toda la documentación de su club y las sugerencias del caso.

Eso es confianza. De lo contrario no hubiesen permitido el viaje de un jugador por el que invierten mucho dinero.

La sanidad de la selección está en contacto todo el año con la de los clubes donde actúan los futbolistas que ingresan en la consideración de Tabárez. Esto facilita el ida y vuelta.

El paso del tiempo le permitió a la sanidad de la celeste ganar en consideración. No hay una sola sanidad en el mundo que dude y desconfíe de su tarea, por eso los rumores en el caso Cavani quedaron despejados al instante.