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La mañana de Mina Bonino junto a Fede Valverde en la que confirmó el cariño de los hinchas de Peñarol por su pareja
Lo que tanto le debe haber contado Federico Valverde a Mina Bonino sobre Peñarol, sus hinchas y el fanatismo, lo debe haber confirmado ella por sí misma este jueves en la Ciudad Deportiva de los aurinegros, donde se inauguró la nueva cancha de entrenamiento que lleva el nombre del futbolista.
La periodista argentina e hincha de River Plate, que está embarazada de seis meses, acompañó a Valverde en la ceremonia de inauguración, en la que también estuvo Benicio, el primogénito de la familia de 3 años.
De campera negra, calzas y botas del mismo color, Bonino participó junto a su pareja en la primera parte de la actividad, en la Casa de Juveniles de Peñarol, donde estuvo atenta al pequeño mientras pasaban los discursos.
Valverde tuvo a Benicio en brazos y luego lo bajó. Mina se agachó y estuvo atenta al niño, quien miraba como hablaban los oradores, portándose muy bien. Los tres recibieron camisetas de Peñarol como regalo de Ruglio.
Luego, la actividad continuó en la cancha, con la inauguración y el descubrimiento de la placa con el nombre de Valverde.
En ese momento se distanciaron un poco porque el futbolista tuvo que mostrar la placa y atender a los medios.
Pero Mina siguió todo atentamente, ahora con lentes de sol oscuros.
Fue a buscar a Benicio que estaba nuevamente en brazos de su padre y se le acercó a Valverde para darle un beso cuando el jugador se emocionó hasta las lágrimas por los aplausos tras ver el cartel con su nombre en la cancha.
Luego, la argentina siguió todo lo que hizo el futbolista, acompañada por familiares de Valverde.
“Bizcochos y fogatita”
Consultada por Referí por si se le podía hacer una nota, amablemente dijo que no porque era el momento de Fede. Aunque sí respondió una par de preguntas a “modo de charla”, por así decirlo.
Dijo que en las vacaciones en Uruguay pasaban muy tranquilos y que disfrutaban con “bizcochos”, sin decir facturas como los llaman en su país, y también de la “fogatita” en la estufa a leña.
Y ante la consulta de si se imaginaba la magnitud que tenía Valverde para Peñarol, dijo que habían hablado muchas veces del tema.
En la mañana de este jueves sin dudas que pudo confirmar lo querido que es su pareja, quien fue solicitado por los hinchas carboneros para sacarse fotos y firmar autógrafos, como también por juveniles y jugadores del primer equipo de Peñarol, y por funcionarios del club.
A Mina también le pidieron fotos y videos, a los que accedió amablemente. Hasta que llegó un momento, ya más de dos horas después de comenzado el evento, tras estar todo el tiempo parada y cuando varios ya se habían retirado, en el que le tuvo que pedir a Valverde y a los hinchas si no podían sacarse las últimas fotos.
Cuando dejaban la cancha hubo más pedidos para las cámaras, a los que Fede aceptó. Ruglio se acercó para saludarlos. “Hablamos luego, quédense hasta la hora que quieran”, les dijo el presidente carbonero, porque iban a ir al Campeón del Siglo.
Luego hubo una última foto de Valverde junto a la placa con su nombre. Mina tomó su celular, se agachó y le sacó una foto al futbolista.
Y al dejar la cancha, Mina Bonino se despidió de quienes quedaban en el lugar, algunos hinchas y algunos periodistas. “Chau, muchas gracias a todos”, dijo.
