La presidenta de la Iglesia Evangélica alemana renunció por sospechas de encubrir abusos sexuales

Según el diario alemán Siegener Zeitung, Kurschus habría estado al tanto desde muy pronto de las acusaciones de abuso formuladas contra un antiguo compañero del distrito eclesiástico de Siegen, pero no tomó ninguna medida al respecto.

La teóloga dijo que era amiga de la familia del hombre. Había tenido conocimiento de las tendencias homosexuales del hombre casado con una mujer y de su infidelidad conyugal, pero no de posibles actos de abuso. Aclaró que nunca fue su intención encubrir a un acusado.

La obispo de Hamburgo, Kirsten Fehrs, asumirá la presidencia en funciones del Consejo de la Iglesia Evangélica en Alemania en forma provisional, como anunció el lunes el EKD. Fehrs expresó su respeto por la decisión de Annette Kurschus.

Cuando la semana pasada se conocieron las acusaciones en su contra, Kurschus se encontraba en una conferencia del EKD, donde habló a los presentes: "Me examino intensamente: ¿he oído algo, he pasado por alto algo? ¿Hay algún malentendido?", dijo.

Cuando fue elegida jefa de la iglesia en 2021, Kurschus había prometido centrarse en los afectados por los abusos.Pero hace unos días apareció la investigación del "Siegener Zeitung".

El editor Tim Plachner habló con quienes acusan de mala conducta a un ex empleado de la iglesia en Siegen. "Hay descripciones de personas afectadas que se refieren a actos sexuales muy concretos que se llevaron a cabo en una iglesia de Siegen", afirmó Plachner.

Desde entonces, la presidenta del consejo ha estado bajo presión debido a las acusaciones de abuso contra el ex empleado de la iglesia que datan de hace décadas.

A finales de los años 90, Kurschus era pastora en Siegen. En aquel momento, según el periódico "Siegener Zeitung", una víctima y otras tres personas le hablaron de abusos sexuales. Kurschus lo niega y afirma que en las conversaciones sólo se hablaba de la orientación sexual del empleado. Pero, según el editor Plachner, tiene dos declaraciones juradas de quienes supuestamente intentaron en aquel momento conversar con Kurschus.

"Así que hoy estamos hablando claramente de conducta sexual inapropiada por parte del acusado. También se ha hablado de esta relación estudiante-maestro, que se supone un abuso de poder. Así nos lo han descrito los dos testigos. o informantes que tenemos”, aclara el editor.

Kerstin Claus, la comisionada de abusos del gobierno federal, cree que las iglesias en particular deben comunicar rápidamente los casos de abuso y no contenerse para no perjudicar a los afectados.

"Todo lo que lleva a que un problema adquiera cada día otra dimensión es perjudicial. Y, sobre todo, es difícil para los afectados, que deben tener derecho a que se traten los problemas de forma adecuada, rápida y transparente”, aseguró Claus.

La fiscalía de Siegen aún no ha presentado cargos contra los acusados. La investigación está en curso.

(Con información de agencias)